Malala Yousafzai nació el 12 de julio de 1997 en la región del valle de Swat, en Pakistán, en el seno de una familia pashtún de religión musulmana suní. Malala es mejor conocida por ser una activista por la educación de las niñas, inspirada por su padre, quien fundó la escuela a la que asistió durante su juventud. Obtuvo reconocimiento a través de sus entrevistas radiales y televisivas, y blogs en los que contó su experiencia viviendo bajo el régimen talibán en el noreste de Pakistán, pero fue realmente catapultada a la fama internacional al ser disparada por talibanes en octubre de 2012.
Tras ser disparada, Malala fue trasladada a un hospital en Birmingham, Reino Unido, para su tratamiento. Después de unas semanas, su familia se unió a ella y no han regresado a Pakistán desde entonces. Se establecieron en Birmingham. Allí, Malala y sus dos hermanos, Kushal, dos años más joven, y Atal, siete años más joven, asistieron a la escuela.
Malala ha hecho muchas apariciones en público desde el infame disparo: en la Universidad de Harvard, en el Palacio de Buckingham, en la Cumbre de las Niñas en Londres y en las Naciones Unidas. Habló en la ONU pidiendo acceso mundial a la educación el día de su cumpleaños número 16, que a partir de entonces se conoce como el Día de Malala. Fue co-ganadora del Premio Nobel de la Paz en 2014, lo que la convirtió en la receptora del Nobel más joven de la historia, con 17 años.
Publicó sus memorias, Yo Soy Malala, en octubre de 2013, y apareció en un documental titulado Él me nombró Malala, estrenado en 2015 y dirigido por Davis Guggenheim, que cuenta la historia del disparo y sus consecuencias. En julio de 2015 abrió una escuela para niñas sirias refugiadas en Líbano, financiada por el Fondo Malala.