Ese relato corto que Mary había empezado a escribir en Villa Diodati, se convirtió en una novela. No era fácil ser una escritora mujer a comienzos del siglo XIX. Por este motivo, en 1818, la primera edición de Frankenstein se publicó de forma anónima, y en tres volúmenes. También esta es una de las razones por las que la obra es especialmente importante para su época: era improbable que una novelista mujer escribiera un texto como Frankenstein o el Prometeo moderno. Además, es uno de los primeros ejemplos del movimiento gótico en la literatura en Inglaterra.
La primera versión publicada en 1818 fue dedicada a William Godwin, el padre de Mary. En 1823, a raíz del éxito de una adaptación...