La novela explora el significado de la narración, ya que incluye una historia dentro de otra historia que está estrechamente vinculada. La vida del protagonista, Daniel Sempere, es un reflejo de la historia del personaje principal de la historia que está leyendo. Como tal simboliza la dualidad del clima político en España durante la guerra civil entre los nacionalistas y los republicanos.
La narración comienza en la Barcelona de los años 40 cuando un viudo lleva a su hijo Daniel a una biblioteca de libros olvidados. En la biblioteca, Daniel encuentra un libro escrito por Julián Carax y se obsesiona con él hasta la edad adulta. A través de rumores, descubre que un hombre desfigurado que lleva el nombre del villano de la novela está destruyendo los libros que quedan. Por ello, Daniel comienza a investigar la vida y la muerte de Carax para encontrar la verdad sobre su turbulento pasado. En el camino se encuentra con diferentes personajes que le ayudan a descubrir al misterioso Carax. Durante la búsqueda, su vida se asemeja a las instancias de la vida de Carax, incluyendo sus relaciones románticas. Aunque repite los mismos acontecimientos en su vida, Daniel consigue tener un final feliz, a diferencia de Carax.
Ruiz destaca el cambio de gobierno del régimen republicano al franquista que trajo consigo tiranía y crueldad. El hecho de que Daniel mate a Fumero le permite escapar de la misma muerte que sufrió su autor favorito. Sin embargo, sigue teniendo que soportar al gobierno fascista que oprime a las masas.
