Catalina Guzmán
Es la protagonista y quien narra la novela. Tiene quince años cuando empieza la relación con Andrés Ascencio; relación que condicionará toda su vida. Es una mujer bella e inteligente, y que padece la falta de libertad (y, por momentos, de felicidad), a la que la somete su condición de casada con un político de esa calaña. Sin embargo, Catalina no se doblega y en varios momentos elige su felicidad por sobre el respetar los deberes que se le imponen. Cuando se enamora, lo hace de hombres completamente diferentes a Andrés.
Andrés Ascencio
Es el marido de Catalina. Cuando empieza su relación con ella, le dobla en edad. Andrés es un hombre de profesión político-militar, que se desempeña como jefe de operaciones militares, gobernador de Puebla y, luego, jefe de asesores del presidente de México. Se caracteriza por el carácter despótico con el que se conduce tanto en la política como en su matrimonio. Andrés lleva adelante sus tareas a través de crímenes y negocios corruptos. Tiene además numerosas amantes e hijos extramatrimoniales.
Carlos Vives
Es un director de orquesta. Personaje importante en la trama en tanto se vuelve el amor de la vida de Catalina, con quien mantiene una aventura amorosa desde que la conoce hasta su muerte. Carlos tiene apenas unos años más que ella y es un viejo conocido de Andrés, puesto que es hijo de un famoso general. En lo que respecta a la política, Carlos sostiene afinidades con líderes como Cordera y Medina, representantes del cuadro político opuesto al de Andrés Ascencio.
Rodolfo Campos
Es un líder político, que desde la mitad de la novela en adelante es presidente de México. Compadre de Andrés Ascencio desde la juventud, Rodolfo es testigo en el casamiento de Andrés y Catalina. La relación entre ambos hombres fluctúa según las decisiones y acercamientos políticos de Rodolfo, pero al menos nominalmente Andrés se conserva hasta el final de sus días como jefe de asesores de Rodolfo en su presidencia.
La narradora por momentos se refiere a él como "Fito" o "El Gordo", en alusión a su aspecto físico. Rodolfo suele manifestar la atracción que siente por Catalina. Ella, en cambio, no siente demasiada simpatía por él, a quien considera un hombre bastante insignificante cuando no desagradable, ni por su esposa Chofa.
Alonso Quijano
Es un director de cine célebre, nacido en Puebla. Catalina lo conoce en el casamiento de Lilia y Emilio. Poco después vuelve a verlo y comienza una relación extramatrimonial con él que acaba cuando Andrés aparece en Acapulco, y Alonso, incómodo por su presencia, se retira.
Lilia
Hija de Andrés y una novicia, al igual que Adriana. Cuando Catalina la conoce, la niña tiene doce años. Es la más bella de las hijas del general. Entabla una buena relación con Catalina desde el principio y se refiere a ella como "mamá".
Cuando Lilia es una jovencita, su padre quiere casarla con el hijo de un hombre con el cual mantiene negocios. Catalina, que se ve reflejada en ella cuando era casi adolescente, hace todo lo posible para impedir esa unión.
Chofa (Sofía de Campos)
Es la esposa de Rodolfo Campos. Al comienzo de su relación intenta dejarlo, pero él le ruega que vuelva, y así ella lo hace. Después vivirá a gusto con él, gozando de los lujos de ser la Primera dama de México. La narradora no la tiene en gran estima ni comparte casi criterio alguno con Chofa.
Mónica y Pepa
Son compañeras del curso de cocina que Catalina hace en Puebla después de casarse. Se mantienen cerca de ella incluso cuando corren rumores sobre los crímenes que comete Ascencio.
Heiss
Es un empresario gringo que fundó su riqueza en base a crímenes y negocios corruptos. Andrés Ascencio se asocia a él para entablar negociados.
Juan Soriano
Es un periodista y director del semanario Avante, único medio que denuncia las atrocidades cometidas por Andrés desde el comienzo de su gobernación. En determinado momento, aparece muerto.
Lucina
Originalmente es empleada doméstica de Marilú Amed, pero cuando Catalina oye que Marilú va a echarla porque la sorprendió intentando abortar, decide emplearla en su casa. Desde entonces se convierte en la fiel niñera de los niños de Catalina y Andrés, y en la mujer que se ocupa de la crianza de estos cuando Catalina decide desligarse de esas tareas. También es quien consuela a Catalina cuando Carlos desaparece y quien le aporta el dato de su paradero.
Juan
Es el chofer de la casa de Andrés y Catalina. Es un joven muy amable. Aunque siempre con temor a ser asesinado por el general Ascencio, Juan se convierte en un gran aliado secreto de Catalina, cómplice de los amoríos de esta.
Álvaro Cordera
Es un líder de la Confederación de Trabajadores de México (CTM) en Ciudad de México. De ideología política comunista, Álvaro es amigo de Carlos Vives y está enfrentado, en cuanto a su cuadro político, a Andrés Ascencio.
Medina
Es un líder de la Confederación de Trabajadores de México (CTM) en Puebla, amigo de Cordera. De ideología política comunista, Carlos Vives se lo presenta a Catalina en una celebración. Medina es quien relata los asesinatos cometidos por Andrés en dos fábricas cuyos trabajadores estaban en huelga exigiendo mejoras salariales. Aparece muerto el mismo día que Vives.
Verania
Es la primera hija de Catalina y Andrés. Nace cuando Catalina tiene diecisiete años. Al crecer, no forja una relación demasiado estrecha con su madre.
Virginia
Es la hija mayor de Andrés de su primer matrimonio. Tiene la edad de Catalina, apenas unos meses mayor. No es agraciada físicamente y no se acerca a Catalina. Al poco tiempo desaparece.
Octavio
Es un hijo de Andrés de su primer matrimonio. Hermano de Virginia, es apenas unos años menor que Catalina. Es amable y se hace amigo de esta. También mantiene un noviazgo con Marcela, su hermanastra de parte paterna.
Adriana
Hija de Andrés y una novicia, al igual que Lilia. Cuando Catalina la conoce, la niña tiene doce años. Al contrario de Lilia, Adriana no forja una buena relación con Catalina y además la juzga por las relaciones extramatrimoniales que esta mantiene.
Sergio (Checo)
Es el segundo hijo de Catalina y Andrés. Su participación en la novela es la de un niño que presencia, por momentos, las conductas corruptas de su padre. Es por la advertencia de Checo, quien oyó a su padre dar la orden para un asesinato, que Catalina decide dividir los espacios y tiempos de los niños y sus padres en la casa.
Bibi
Es una amiga de Catalina. La conoció cuando Bibi era esposa de un médico que salvó a Checo, y luego de que el médico murió ellas continuaron la amistad. Bibi se convierte en la amante de Gómez Soto, un militar violento que compra una casa para vivir allí con ella (y mantener así su relación en secreto). Luego acaban casándose.
Gómez Soto
Es un General. En un principio es un hombre casado y con hijos que sostiene un amorío con Bibi, amiga de Catalina. Es un hombre agresivo, sobre todo cuando bebe alcohol. Cuando muere su esposa, se casa con Bibi.
Marta
Es hija de Andrés. Catalina la conoce cuando la niña tiene quince años. La relación entre ella y Catalina es amable aunque algo indiferente.
Marcela
Es una hija de Andrés. Catalina la conoce cuando la niña tiene trece años. La muchacha mantiene una relación de novios con Octavio, su hermanastro por lado paterno.
Doña Herminia
Es la madre de Andrés. Mujer delgada, pobre hasta que su hijo asciende en la política. Se mantiene viviendo en Zocatlán, en una casa comprada por Andrés, y sobrevive a su hijo, que muere cuando ella tiene 94 años.
Doña Herminia es muy importante para Andrés, tanto que lamenta no poder actuar contra hombres como Cienfuegos porque su madre le tiene cariño.
Marilú Amed
Es la esposa de un empresario rico que hace negocios con Andrés Ascencio. Marilú siempre ostenta su riqueza, vistiendo un abrigo de zorro aunque haga calor, y se comporta con cierta crueldad hacia sus empleadas. Catalina no la tolera.
Carmela
Es la viuda de uno de los asesinados por Ascencio en Atecingo. Se reencuentra a Catalina en la boda de Lilia y luego en su casa, cuando pasa a venderle dulces. Es quien le da a Catalina las hebras de té negro, advirtiéndole que en una dosis sostenida pueden dar muerte a alguien.
Emilio (Milito) Alatriste
Es un joven hijo de un hombre buen posicionado económicamente, y por esto es que es el candidato elegido por Andrés para casarse con su hija Lilia. El joven está en verdad en pareja con otra chica, Georgina Letona, pero su propio padre lo empuja también a casarse con la hija del general Ascencio, lo cual termina haciendo.
Georgina Letona
Es la novia de Emilio Alatriste, que lo acepta cada vez que el joven vuelve con ella, hasta que finalmente este se casa con Lilia.
Tirso Santillana
Es el Procurador de Justicia en Puebla, durante el gobierno de Benitez. Según Catalina, Tirso es un notario respetado que no quiso trabajar para Andrés. A él recurre cuando se entera de que Carlos Vives fue llevado a una cárcel clandestina. Tirso realiza la investigación justa y renuncia a su cargo al descubrir las irregularidades.
Felipe Benitez
Es gobernador de Puebla, sucesor de Andrés Ascencio. Mantiene buenas relaciones con Andrés y, según se evidencia por el hecho de que conserve la cárcel clandestina instaurada por este, no difiere mucho de sus principios.
Pellico
Es el Jefe de policía, en acción durante el gobierno de Andrés y también del de Benítez. La cárcel para presos políticos instaurada por Ascencio funciona bajo su responsabilidad.
Benito
Es el chófer de Andrés Ascencio.
Esparza y Téllez
Son los médicos que atienden a Andrés en sus últimos días.
Josefita Rojas
Es una señora que saluda a Catalina en el velorio de Andrés. Es quien le dice que se alegra por ella, puesto que la viudez es el estado ideal de la mujer.
