Tío Vania. Escenas de la vida en el campo, en cuatro actos (1897) es una de las obras más importantes del dramaturgo ruso Antón Chéjov y un pilar del teatro universal. La obra se desarrolla en la finca de la primera esposa del profesor Serebriakov, donde él y su segunda esposa se ven obligados a quedarse temporalmente. Su estadía desestabiliza la armonía de quienes vivían allí, Vania y Sonia, y arroja la casa al caos. El drama se desenvuelve entre desilusiones, desesperación, amores no correspondidos, envidia, celos y frustraciones.
Chéjov escribió la obra en los últimos años de su vida. Tío Vania es una reelaboración de una obra suya anterior, El espíritu del bosque (1888). Entre los principales cambios que involucran la nueva versión, está el de la reducción del número de personajes a prácticamente la mitad, y el pasaje de un suicidio a un intento fallido de asesinato. Los críticos consideran que el autor volvió a trabajar en el texto de El espíritu del bosque durante su visita a la colonia penitenciaria de la isla de Sajalín, en el extremo oriente de Siberia, en 1891.
Tío Vania se estrenó por primera vez en Moscú, en el Teatro de Arte de Moscú en 1899, dirigida por Konstantin Stanislavski (quien también interpretó el personaje de Astrov). En esa época Chéjov estaba demasiado enfermo y no pudo viajar para asistir al estreno ni a las primeras representaciones. Vio esta puesta en escena de la obra, por primera vez, el 10 de abril de 1900 en Sebastopol.
Tío Vania fue inmensamente popular entre los rusos, que se vieron representados en el escenario. Los médicos apreciaron a Astrov, y los ciudadanos vieron reflejado su arduo trabajo y sufrimiento en Sonia y Vania. Años después, las representaciones de la obra en otras partes del mundo reflejaron su universalidad. Al día de hoy, se trata de una de las piezas más representadas de Occidente.