"El suplicio forma, además, parte de un ritual. Es un elemento en la liturgia punitiva" (p. 40). (Símil)
Si entendemos que la liturgia son los elementos y prácticas que hacen al rito de la misa cristiana, que Foucault use la expresión "liturgia punitiva" establece una relación de similitud entre ella y la práctica punitiva.
"Por detrás de los dispositivos disciplinarios, se lee la obsesión de los 'contagios', de la peste, de las revueltas, de los crímenes, de la vagancia, de las deserciones, de los individuos que aparecen y desaparecen, viven y mueren en el desorden" (p. 201). (Metáfora)
Foucault toma a la peste como metáfora de la criminalidad, donde las instituciones disciplinarias tienen la función de "curar" a los afligidos por esa enfermedad. Esta construcción metafórica se extiende a lo largo de todo el ensayo del autor, y puede verificarse en diversas instancias, como en el trato de los infractores como si fueran enfermos a ser curados.
"Tantos pequeños teatros como celdas" (p. 203). (Símil)
Refiriéndose a la construcción del Panóptico, para ilustrar el régimen de visibilidad que el edificio estructura, el autor habla de las celdas como si fueran "pequeños teatros", donde el "actor" no es otro que el recluso que la habita. Es interesante pensar también qué relación guarda este ejemplo con la concepción de los individuos como "actores sociales" en un sentido más amplio.
