El Desfile del Amor Imágenes

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Recuerdo vago del eco de los disparos (imagen auditiva)

"¿En dónde se había producido la balacera?, por ejemplo. ¿En el patio frente al cual estaba? ¿En las escaleras? ¿Dónde en realidad habían tenido lugar los disparos? Alguna vez, al recordar su infancia, había sentido un aleteo, el eco de recuerdos perdidos, que lo relacionaba con los disparos y la gran perturbación producida en la vida de sus familiares. Lo que le llegó fue un eco muy vago, a pesar de la significación que aquella noche tuvo en su vida".

Cuando Miguel Del Solar recuerda su infancia y el asesinato que tuvo lugar en el edificio Minerva en el cual vivía en aquel entonces, se detiene en tratar de recordar el sonido que habrán producido los disparos que mataron a Erich. Sin embargo, quizás por ser apenas un niño, el sonido se pierde en su memoria y no recuerda si lo que escuchó fueron o no esos disparos.

Casa de Delfina Uribe (imagen visual)

"Mientras aparecía Delfina, Del Solar se dedicó a examinar la planta baja de su casa; dos grandes cubos luminosos, el primero una sala, y el otro un comedor, abiertos a otros espacios menos amplios. Un orden severo y estricto, pero no necesariamente frío. El reparo más serio que pudiera hacérsele a esta casa, pensó, provenía de su aire levemente escenográfico, como el de casi todos los lugares que se viven poco. Algunos techos estaban pintados de un solferino muy pálido, dos de las paredes de color rojo Siena. Lo demás era todo de blancura radiante, morisca. Había un par de muros de cristal, uno en el comedor, otro en una pequeña salita; ambos daban a un jardín casi tropical. Los muebles, de línea muy escueta, poseían una comodidad inadvertida a simple vista".

El protagonista visita la casa de una mujer que aparentemente estuvo bastante involucrada en el incidente de Erich, Delfina Uribe. Ella es dueña de una galería de arte que funcionó como un punto de referencia muy importante para artistas de variada índole. Como podemos observar en esta cita, su propia casa parece en sí misma una obra de arte.

Casa de Ida Werfel (imagen visual)

"La gran sala no contenía sino el busto iluminado de la hispanista insigne. El resto de la planta baja estaba compuesto por la nutrida biblioteca, colocada en varios salones pequeños. Las estanterías corrían del suelo al techo; en cada habitación había mesas de trabajo".

En este caso, Miguel Del Solar ha ido a la casa de Ida Werfel, guiado por Emma Werfel, quien le cuenta sobre su madre mientras recorren los espacios de la vivienda.

Gestos de Belmorán al contar lo que recuerda (imagen visual)

"Gesticulaba demasiado. Se contraía, se retorcía, se anudaba. Hacía pausas eternas con el brazo en alto, tendido hacia adelante, trémulo, impaciente, señalando que no había aún terminado de decir lo que se proponía, que no cedería la palabra, que el verbo a punto de surgir de sus labios era tan extraordinario, que el auditor al oírlo perdería el aliento".

En esta escena apreciamos el lenguaje corporal de Belmorán, mientras se encuentra tomando unas copas y conversando con Del Solar. Se evidencia aquí el carácter violento y autoritario del personaje entrevistado, a juzgar por la brusquedad de sus movimientos y su tendencia a hablar solo sin dejarse interrumpir.

Descripción del interior de la casa de Coyoacán (imagen visual)

"Una casa llena de objetos cuya combinación los hacía parecer insólitos; muebles antiguos muy sencillos, conventuales casi, y un mundo de objetos extraños, alegres y brillantes que iban de lo elemental a lo más rebuscado. Pequeños juguetes artesanales, esferas brillantes, gigantescas copas de cristal de Bohemia y de carretones rebosantes de vieja quincallería multicolor, ángeles barrocos, talavera de Puebla, varios cuadros excelentes, casi todos suyos".

En esta imagen visual el narrador describe la casa que visita Del Solar cuando se reúne a conversar con Escobedo sobre los hechos de 1942. En la cita observamos un conjunto variado de objetos que llaman la atención del protagonista justo antes de acercarse a saludar al pintor.

Zumbido previo a una carcajada (imagen auditiva)

"Se oyó un ruido extraño. Un zumbido incómodo, cercano. La novia de Arturo, una chica rubia de cabello corto extremadamente rizado, se cubría la boca con un vaso. De ahí parecía salir el zumbido. De pronto comenzó a derramarse el contenido del vaso. ¿Hacía acaso gárgaras?, ¿mordía el vaso? Una carcajada desbocada de Arturo estalló de repente. El líquido de la copa de su novia saltó sobre el mantel. La chica reía como si fuera víctima de un ataque. Todos comenzaron de inmediato a hablar en voz muy alta".

En esta graciosa escena encontramos una imagen auditiva que recupera el sonido disimulado que emite una chica antes de comenzar a reírse abiertamente. Al comienzo, el narrador resalta que se oye como un zumbido que no queda claro de dónde proviene, hasta que se hace evidente cuál es su causa.

Conductor se acerca con su auto a Del Solar (imagen visual)

"Un coche verde oscuro pasó casi rozándolo, disminuyó la velocidad y se detuvo unos cuantos metros delante de él. El automóvil, con una placa rota y un número ilegible, comenzó a retroceder con lentitud y cuidado, hasta situarse al lado del historiador. Del Solar advirtió de golpe la soledad. En la calle sólo existían él y el coche verde. [...] El coche se había situado a su lado. La ventanilla delantera comenzó a descender, y una cara tosca, de boxeador joven, le preguntó por la calle de Santuario".

Esta imagen visual remite a la última escena de la novela, en la que el protagonista, Miguel del Solar, cree que va a ser atacado por Martínez, cuando en realidad la persona del auto es desconocida y solo quiere preguntarle por una dirección.

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