En La Guaracha del Macho Camacho, la historia entrelaza a varios personajes de contrastada condición social durante un atasco en hora punta. A través de la voz de un locutor de radio, se recuerda a los lectores el reciente éxito de la nueva canción guaracha de Macho Camacho. Dos de los protagonistas quedan atrapados en el atasco a las 5 de la tarde y se exploran simultáneamente las historias de todos los personajes.
El senador Vicente Reinosa se dirige a una cita clandestina con su amante, Heathen Chinky, cuando se encuentra atrapado en un atasco. Como político puertorriqueño de 45 años, Vicente se considera un experto en elegancia, oratoria y mujeres. Para su disgusto, se encuentra tarareando la guaracha de Macho Camacho en medio del atasco. Sin embargo, su bochorno queda pronto eclipsado por la noticia de la explosión de una bomba en el Edificio de Ciencias Sociales de la Universidad de Puerto Rico. Este episodio pone de manifiesto el desdén de Vicente por los nacionalistas, así como su ambición de poder: aspira a convertirse en gobernador de Puerto Rico.
Mientras tanto, la esposa del senador, Graciela Alcántara, está sentada en la sala de espera de su psiquiatra, el doctor Severo. Está preocupada leyendo una revista y una foto de la casa mexicana de Elizabeth Taylor y Richard Burton cautiva su atención en Puerto Vallaría. Esta foto le trae recuerdos de su estancia en Suiza y despierta su descontento por vivir en Puerto Rico. Desprecia cualquier cosa que no pertenezca a su clase alta, especialmente la guaracha de Macho Camacho, que le parece de clase muy baja. Cuando por fin entra en su sesión, pregunta si al Dr. Severino le gusta la canción, a lo que él accede.
La historia presenta a la Madre y a su vecina Doña Chon, que pasan el tiempo juntas en la cocina hablando de diversos temas, como la comida, la vida, el dinero, la maternidad y las dificultades a las que se enfrenta la gente más pobre. Entonces la Madre tiene que salir para una cita y le pide a Doña Chon que vaya al parque a buscar a su hijo que se ha quedado tomando el sol. En el parque, el niño es objeto de burlas y malos tratos por parte de otros niños, y finalmente uno de ellos le pone un espejo en la cara, lo que le hace huir despavorido.
Simultáneamente, la novela sigue la historia de Benny, el hijo del senador, que está atrapado en el atasco con su flamante Ferrari. Reflexiona sobre su experiencia en la Universidad de Puerto Rico y sobre dos malvadas aventuras que vivió con sus amigos. En una, bombardearon las oficinas de unos separatistas, y en la otra, quemaron los genitales de una prostituta. Benny acaba encontrando un hueco en el tráfico y se aleja a toda velocidad, atropellando al niño mientras Doña Chon grita al verlo.
