La madre
Se trata de una mujer que emprende un largo viaje junto a su hija para visitar la tumba de su hijo, un ladrón que fue asesinado una semana atrás durante un intento de robo. Cuando la madre llega al pueblo, se dirige a la casa cural para pedir las llaves del cementerio. Una vez allí, se enfrenta al juicio del sacerdote y de todo el pueblo, pero nada puede hacerla desistir en su empeño de llevarle flores al hijo muerto. Una vez que tiene las llaves, sale de la casa cural para ir al cementerio bajo a la mirada escrutadora de todo el pueblo.
La hija
Es la hija de la protagonista. Tiene doce años y viste de luto. Acompaña a su madre durante todo el viaje hasta el cementerio.
El sacerdote
Se trata del sacerdote de la iglesia del pueblo. Es quien tiene la llave del cementerio y, por ende, la madre debe hablar con él para poder visitar la tumba de su hijo. Cuando el sacerdote nota que la gente del pueblo rodea la casa, le sugiere a la madre que aguarde un momento para salir, pero ella ignora su consejo.
La hermana del sacerdote
Se trata de la mujer que atiende a la madre y la hija en la casa cural. Cuando recibe a las dos visitantes, les explica que es el horario de la siesta y les recomienda volver más tarde. Sin embargo, ante la insistencia de la mujer, cede y llama al sacerdote.
Rebeca
Es la mujer que mata a Carlos Centeno de un disparo cuando, en medio de la noche, escucha que alguien está intentando forzar la puerta para entrar a su casa.
Carlos Centeno Ayala
Se trata del hijo de la protagonista. Tal como lo expresa su madre, Carlos a veces roba para poder llevar alimentos a su familia. Una noche, intenta entrar en la casa de Rebeca, pero la mujer dispara desde el otro lado de la puerta y lo mata.
La gente del pueblo
Se trata de los habitantes del pueblo al que viajan la madre y la hija. La gente del pueblo se presenta de manera generalizada en dos ocasiones: en un principio, cuando las mujeres llegan y los ciudadanos duermen la siesta. Luego, cuando las visitantes están por salir de la casa cural para ir al cementerio, la gente del pueblo está despierta y espera la aparición de la madre del ladrón.