Una llegada celestial (símil)
"En el punto más lejano del cielo, justo donde nace el amanecer, irrumpe un destello de luz denso, como una estrella fugaz. Su estela luminosa parece difuminarse a medida que se aproxima, mientras que una forma que nace de su centro comienza a definirse contra la inmensidad del espacio sideral."
Este símil se utiliza para describir la aparición del marido de Celia. La imagen de una estrella fugaz sugiere una entrada dramática con una iluminación brillante que capta la atención. El uso de luz densa añade riqueza a la descripción, que enfatiza la luminosidad del momento. En conjunto, el símil transmite una sensación de asombro ante la llegada del marido de Celia. Esto hace que su entrada parezca de otro mundo y mágica.
Doble Hélice (metáfora)
"Milagro y yo nos tenemos la una a la otra. Somos una hélice doble, compacta e impenetrable. Por esto Mamá no puede entrar en nosotras."
Con esta metáfora, la narradora describe el vínculo entre ella y su hermana, Milagro. La metáfora de una hélice sugiere una fuerza fuerte y cohesiva que las impulsa a avanzar juntas. Transmite la idea de que su conexión es dinámica, poderosa y esencial para su apoyo mutuo. El uso de los términos compacto e impenetrable refuerza la idea de que su unidad es sólida y no puede romperse fácilmente. Además, la metáfora implica un sentimiento de fuerza compartida frente a sus difíciles circunstancias familiares.
Deseos inconfesables (símil)
"La agilidad de Lourdes sorprendía a Rufino. Cuanto más pesada se ponía, mayor era la flexibilidad de su cuerpo. Sus piernas daban vueltas y rotaban como las de una acróbata, su cuello giraba como si tuviese un doble soporte. Y su boca. La boca y la lengua de Lourdes eran como las bocas y lenguas de doce mujeres expertas."
Este símil describe las habilidades físicas de Lourdes y la flexibilidad de su cuerpo. La comparación con una acróbata subraya la destreza con la que Lourdes se mueve incluso cuando gana peso. El símil se extiende a su cuello, lo que sugiere una notable amplitud de movimientos. En general, describe una vívida descripción de la destreza física de Lourdes y el contraste entre su apariencia y sus ágiles movimientos.
El agua en la cesta (metáfora)
"El agua no puede transportarse en una cesta - le dice el santero moviendo la cabeza - . Lo que deseas, hija, no lo puedes tener. Es la voluntad de los dioses."
En esta metáfora, el santero utiliza la idea del agua en un cesto para transmitir la noción de que los deseos de Felicia, en particular su deseo de un nuevo marido, no pueden cumplirse. La metáfora sugiere la imposibilidad de contener o alcanzar lo que ella desea, lo que enfatiza la fuerza divina que determina el resultado. Transmite una sensación de inevitabilidad y subraya la idea de que ciertas aspiraciones escapan al propio control.
Tendones tensos (símil)
"Los tendones se le tensan, estirándosele como los músculos de las vacas de la carnicería que habían muerto aterrorizadas. Su carne nunca llegaba a ser tan tierna como la de los animales que no habían presagiado su muerte."
En esta afirmación, los tendones de Felicia se comparan con los músculos de las vacas en una carnicería. El símil establece un paralelismo entre el esfuerzo físico de Felicia y los tensos músculos de la carne de vaca. La vívida imagen de las vacas en una carnicería añade una capa de peso emocional a la experiencia de Felicia. Destaca la tensión que siente al subir la montaña. La comparación subraya las duras condiciones del viaje en Sierra Maestra.