Sethe cree que Amada es su hija asesinada reencarnada. Describe todas las coincidencias y conexiones que prueban que Amada es su hija.
“Habría sabido de inmediato quien eras cuando el sol ofuscó tu cara de la forma en que lo hizo cuando te llevé al emparrado de vides. Lo hubiera sabido de inmediato cuando me oriné incontrolablemente. Y cuando te vi la cara, tuve mucho más que un simple atisbo de cómo sería tu apariencia después de todos estos años. Habría sabido quien eras de inmediato porque las tazas de agua que bebiste se correlacionaban con el hecho de que babeaste saliva clara sobre mi vendaje el día que llegamos a 124. Lo habría sabido enseguida pero Paul D me distrajo. De otra manera, habría visto la huella de las uñas de mis dedos allí, sobre tu frente para que la viera todo el mundo. De cuando sostuve tu cabeza en alto, allí en el cobertizo. Y después, cuando me preguntaste sobre los pendientes que yo solía balancear para que tú jugaras con ellos, te habría reconocido de inmediato, si no hubiera sido por Paul D”. Capítulo 20, pág. 203
Ahora que están juntas, Sethe le va a enseñar a Amada todo lo que una madre debería enseñar a una hija. Sethe debido a que su madre fue una mujer desconocida en un campo de arroz desea convertirse en la madre que ella nunca tuvo.