Cartas a un joven poeta Preguntas de Ensayo

¿Cuál es el tema más importante de Cartas a un joven poeta?

El tema más importante es la soledad. Es el único tema sobre el que Rilke reflexiona, prácticamente, en todas las cartas. Además, lo relaciona con otros temas importantes de la obra que, de algún modo, son abarcados por la soledad: la formación del artista, la relación entre la crítica literaria y el arte, el sexo, el amor, la profesión, la infancia, la unión con Dios y la tristeza.

En definitiva, para Rilke el punto de partida del ser humano es aceptar su condición de solitario; no esquivarla sino afrontarla, aunque genere dolor y miedo, y aprender así de la soledad. De ese modo, podrá comprender la verdad de los otros temas y, por lo tanto, de la totalidad de la vida.

¿De qué manera puede encontrarse la riqueza artística en una vida monótona, según Rilke?

Para Rilke, si la vida cotidiana le parece pobre al artista, no es culpa de la vida, sino del artista. Afirma incluso que, aunque esta vida fuera absolutamente monótona, como la de alguien que está encerrado en una cárcel, el artista tiene una manera de encontrar riqueza en esa monotonía: a través de los recuerdos de la infancia.

Si el artista logra recordar cómo era ese niño solitario que atravesaba su vida sin comprender los asuntos de los que se encargaban sus padres; si logra mirar su vida con esa mirada extrañada del niño que se conectaba con las cosas que lo rodeaban de manera esencial, inocente; de ese modo, podrá encontrar riqueza en su vida cotidiana aunque sea, superficialmente, monótona.

¿Con qué compara Rilke, alegóricamente, la tristeza?

A través de una alegoría, Rilke compara la tristeza con un huésped que entra en una casa vacía. La idea es que, aunque ese huésped sea silencioso y no modifique de manera evidente la casa, de todos modos la casa estará transformada al ser habitada por él. Así, la tristeza entra en el interior de las personas, a veces, de manera imperceptible. Y aunque la persona pueda seguir viviendo sin que su vida normal se derrumbe, la tristeza generará lentamente una transformación en su interior.

Por eso, para Rilke, es importante que las personas conozcan al huésped, es decir, los motivos de la tristeza. De ese modo, la transformación será comprendida, y las personas no se verán sorprendidas cuando esta suceda.

¿Cuál es, según Rilke, el modo de superar los obstáculos que impone la profesión?

Aunque no estén sus cartas en la obra, se deduce por las respuestas de Rilke que Kappus no se siente a gusto con su profesión. Ante esto, Rilke le da varios consejos. Según él, todas las profesiones (no solo la carrera militar de Kappus) son, a priori, hostiles al desarrollo interior de las personas, dadas sus exigencias y su superficialidad. Esa superficialidad también puede estar en los compañeros de trabajo, con los cuales puede ser difícil entablar una relación verdadera.

Ahora bien, estos obstáculos que impone la profesión para el desarrollo interior se superan refugiándose en la soledad. Gracias a la intimidad que se genera en la soledad, la persona puede conectarse con aquello que lo rodea, con la verdad profunda de la naturaleza y de sí mismo. En esa profundidad, todo es mucho más verdadero que en la superficialidad de la profesión. Por lo tanto, en la soledad está la respuesta para no ser vencido espiritualmente por las exigencias diarias de la profesión.

¿Qué opina Rilke sobre la crítica artística?

Para Rilke, la crítica es incapaz de comprender las obras de arte. Estas son objetos misteriosos, y la crítica, con su lenguaje, que busca la comprensión absoluta, es incapaz de develar esos misterios.

Además, la crítica debe dar una opinión general que pueda ser compartida por el resto de las personas y, en realidad, para Rilke las obras solo pueden ser comprendidas por cada una de las personas, en su soledad íntima, a través de sus propios sentimientos.

Por lo tanto, no existe la posibilidad, siquiera, de que haya buenos críticos de arte, ya que estos siempre estarán obligados a apoyarse en convencionalismos sociales para ser comprendidos por el resto de las personas, y a afirmar verdades universales.