El metateatro es un término popularizado por Lionel Abel en los años ’60 para denominar un recurso teatral que se utiliza desde el comienzo del teatro occidental en Grecia: la representación de una obra de teatro dentro de una obra de teatro.
Desde fines del siglo XIX, las corrientes teatrales más importantes eran realistas, buscando representar la realidad social y psicológica de los personajes. Sin embargo, a partir de la década del ’20 y en paralelo a los movimientos de vanguardias estéticas, aparecen obras de teatro que buscan romper con estos esquemas. El metateatro fue uno de los recursos predilectos de estos nuevos dramaturgos, ya que supuso una reflexión sobre el teatro mismo y una forma de recordar al espectador que está frente a una ficción.
Uno de los autores paradigmáticos que influyó en el teatro de Alejandro Casona fue Luigi Pirandello, reconocido por su obra maestra Seis personajes en busca de un autor, de 1921. En ella, seis personajes producto de la fantasía de un escritor le ruegan a un director de teatro que dé forma al drama para que ellos puedan existir.
El pirandellismo de Casona radica en su tratamiento del tema de la relación entre la realidad y la fantasía. En algunas obras, estos elementos aparecen confundidos, como en La dama del alba o La sirena varada. En Prohibido suicidarse en primavera, se halla en la locura de los personajes, quienes, para poder sobrevivir, se inventan otra realidad interpuesta a la suya.
En el caso de Los árboles mueren de pie, la obra nos presenta explícitamente una simulación que deben llevar a cabo los actores Marta y el Director, quienes asumen los papeles de Mauricio Balboa y su esposa, Isabel. La obra transcurre en dos espacios. El primero, mezcla de oficina y camarín de teatro, es el lugar donde a los actores se les ofrece su guión, son contratados y se preparan para el papel que deben cumplir. El segundo es la casa de la abuela, el escenario donde interpretarán su papel. Así, el mundo de la fantasía interviene en la realidad para sostener la felicidad de la abuela. De manera indirecta, Casona argumenta la importancia del teatro en la vida social de los seres humanos y la necesidad que tienen de la fantasía para poder vivir.