Matar un Ruiseñor
por Harper Lee
Matar un Ruiseñor Vídeo
Vea el vídeo clip ilustrado de los personajes de la popular novela, Matar un Ruiseñor, de Harper Lee.
Transcripción del Vídeo:
Matar a un Ruiseñor toma lugar en el pueblo de Maycomb, Alabama, durante el periodo de la Gran Depresión en Estados Unidos. Esta historia es narrada por una niña llamada Jean Louise Finch, a quien también se le llama “Scout” durante toda la novela.
Los personajes principales incluyen:
• Atticus Finch es el padre de Scout y de Jem, el hermano mayor de aquella, y es un abogado con altos estándares morales.
• Charles Baker Harris, a quien también se le conoce como “Dill” durante la historia, es el amigo de Jim y Scout, los visita todos los veranos desde Mississippi.
• Calpurnia, la sirvienta y cocinera de la familia Finch es una figura materna para Scout.
• Boo Radley es el misterioso vecino de los Finch, y vive siempre encerrado en su casa.
• Walter Cunningham es uno de los niños más pobres en la escuela de Jim y Scout.
• Tom Robinson es un hombre de raza negra acusado de violar a una mujer blanca.
• Mayella Ewell es la mujer blanca que acusa a Tom de violación.
• El Sr. Bob Ewell es el padre de Mayella.
Al comienzo de la novela, Scout, Jem, y Dill están fascinados con la historia del solitario Boo. Éste vive cerca de la casa de los Finch y cuenta una leyenda local que, hace tiempo, Boo acuchilló a su propio padre en la pierna con unas tijeras. Los niños se lo imaginan como si fuera un monstruo.
Los niños se divierten haciendo pequeñas obras de la vida de Boo. Comienzan a acercarse cada vez más a la casa de los Radley, la cual se dice está embrujada. Los niños intentan dejar una nota para Boo en su ventana con una caña de pescar pero los sorprende Atticus. Éste los regaña firmemente por burlarse de la vida de un triste hombre.
Los niños continúan merodeando por la casa de los Radley en la noche. El hermano de Boo cree escuchar a un ladrón y dispara con la pistola. Los niños huyen pero Jem deja sus pantalones enredados en una cerca al intentar escapar. Cuando Jem regresa por ellos a medianoche, sus pantalones han sido esmeradamente doblados y el rasgón causado por la cerca ha sido remendado.
Más cosas misteriosas comienzan a sucederles a los niños Finch. Un árbol cerca de la casa de los Radley contiene un hueco en el cual alguien les deja regalos. Los niños encuentran monedas, goma de mascar, y figuras de jabón muy parecidas a Scout y Jem. Los niños tratan de dejar una nota al misterioso donante, pero se dan cuenta de que el hermano de Boo ha cubierto el hoyo con cemento.
Un día, Jem invita a almorzar a uno de sus compañeros de clase más pobres, Walter Cunningham. En la casa de los Finch, Scout nota que Atticus y Walter hablan acerca de la agricultura como “dos hombres”. Walter pide un poco de melaza para echársela a la carne y a la verdura. Cuando Scout le pregunta groseramente qué es lo que cree que está haciendo, Calpurnia le da una lección en la cocina acerca de cómo tratar a los invitadossin importar la crianza o modales de estos.
Entretanto, Atticus decide tomar el caso de un hombre de raza negra llamado Tom Robinson, quien ha sido acusado falsamente de violar a una mujer muy pobre llamada Mayella Ewell. La familia Finch enfrenta mucha crítica por parte del pueblo racista de Maycomb debido a la decisión de Atticus de defender a Tom. Atticus cree que Tom es inocente pero también cree que no tiene posibilidades de ser liberado; el jurado compuesto de hombres blancos jamás le creerá a un hombre negro en vez de a una mujer blanca. A pesar de esto, Atticus está decidido a enseñarles la verdad a todos en el pueblo.
Debido a que Atticus está defendiendo a un hombre negro, Scout y Jem son el blanco de habladurías y burlas por parte del pueblo. En la cena familiar de Navidad, Scout golpea a su odioso pariente Francis cuando éste acusa a Atticus de arruinar el nombre de la familia al ser un “amante de negros.”
No mucho después de esta escena, Atticus pronuncia una de las frases más famosas de la novela. Éste les dice a sus hijos, “Dispárales a todos los arrendajos azules que quieras, si puedes alcanzarlos, pero recuerda que matar a un ruiseñor es pecado.” En la novela, el ruiseñor se convierte en un símbolo de inocencia relacionado tanto con Boo Radley como Tom Robinson.
La noche antes del juicio, Tom es trasladado a la cárcel del condado. Temiendo que una muchedumbre se fuera a reunir para linchar a Tom, Atticus se queda afuera de la cárcel toda la noche haciendo guardia. Jem está preocupado por su padre, y los tres niños van al pueblo a escondidas para buscarlo. Un grupo de hombres llega amenazando a Atticus y queriendo comenzar una riña. Al principio Jem, Scout y Dill sólo observan pero cuando Scout presiente un peligro eminente ésta corre hacia ellos y comienza a hablarle al papá de su compañero de escuela, Walter Cunningham. La inocencia de Scout calma a la muchedumbre y todos se marchan.
Durante el juicio, los Ewells testifican que Mayella le pidió a Tom ayudarla con sus quehaceres mientras su padre estaba fuera, y que una vez dentro de la casa Tom la golpeó y violó hasta que su padre llegó y lo ahuyentó. Tom asegura que Mayella lo invitó a pasar, lo abrazó y comenzó a besarlo. Tom trató de quitársela de encima. Cuando Bob Ewell llegó, se enfureció con Mayella y comenzó a golpearla mientras Tom huía asustado.
Según el testimonio del jefe de la policía, los moretones de Mayella estaban del lado derecho de su cara lo que quiere decir que es muy probable que fuera agredida por un zurdo. El brazo izquierdo de Tom no sirve debido a un accidente, mientras que el Sr. Ewell es zurdo.
Dada la evidencia, Tom debería ser puesto en libertad, pero después de muchas horas, el jurado lo declara culpable. Scout, Jem, y Dill entran a escondidas a la corte para ver el juicio y se sientan con las personas de raza negra. Se quedan sorprendidos al escuchar el veredicto ya que para ellos la evidencia está claramente a favor de Tom.
El veredicto es trágico, pero Atticus se siente satisfecho por el hecho de que el jurado tardara tanto tiempo en decidir. Atticus tiene fe en la apelación, pero Tom trata de escapar de la prisión y muere en el intento. A Jem le cuesta mucho asimilar el resultado del juicio y siente que su confianza en la bondad y racionalidad humana ha sido traicionada.
Mientras tanto, el señor Ewell amenaza a Atticus por haber sido humillado durante el juicio. Decide vengarse una noche en la que Jem y Scout, quien está vestida como un jamón gigante, van rumbo a casa después de la obra de teatro escolar de Halloween. El señor Ewell los sigue hasta su casa y valiéndose de la oscuridad intenta acuchillarlos con un cuchillo de cocina. Jem se rompe el brazo, y Scout, quien no puede ver bien ni moverse debido a su botarga queda indefensa durante el ataque. El solitario Boo Radley acuchilla al señor Ewell y salva a los niños.
Finalmente, Scout puede conocer al tímido Boo. Al final de esta noche, el jefe de la policía declara que el señor Ewell cayó encima de su cuchillo, de manera que Boo no enfrenta cargos por homicidio. Scout lleva a Boo a su casa y se imagina como este la ha estado observando a ella Jem, Dill, y a todo el pueblo desde adentro de su casa. Boo entra a su casa, cierra la puerta, y Scout nunca lo vuelve a ver.