Nadja Símbolos, Alegoría y Motivos

Nadja Símbolos, Alegoría y Motivos

Fantasma como símbolo del tormento

"La imagen que yo tengo de un "fantasma", con todo lo convencional que resulta tanto en su apariencia como en su ciega sumisión a determinadas contingencias de hora y lugar, representa para mí sobre todo la manifestación perfecta de un tormento que puede ser eterno".

En este texto, André Breton sostiene una teoría acerca de su propio yo. Dice que él mismo es como un fantasma, o al menos una parte suya lo es. Se refiere a que siempre hay un aspecto de cada persona que incluye todo lo que ya fue, todo lo que ya no es. Y que esto representa, asimismo, un tormento para cada cual, es decir que es causa de sufrimiento porque ya no puede volver a ser, pero, sin embargo, sigue existiendo en algún nivel.

Nadja como símbolo

"Me dice su nombre, el que ella misma ha adoptado: 'Nadja, porque en ruso es el principio de la palabra esperanza y porque no es más que el principio'".

Por un lado, el nombre que adopta la protagonista de esta historia significa 'esperanza', por lo que su figura en alguna medida simboliza este estado de ánimo. Por otro lado, En más de una ocasión, Breton, el narrador de la historia, resalta la inocencia y fragilidad de Nadja, así como sus ocurrencias divertidas y su liviandad o soltura para desplazarse por las calles. En ese sentido, la considera un símbolo de pureza y de libertad.

Sueño y asociación libre como motivos

André Breton es el mayor representante de lo que se conoció como el surrealismo, una corriente artística que explora los límites entre la consciencia y la inconsciencia. Influido por las ideas de Sigmund Freud, -quien fue conocido como 'padre del psicoanálisis'-, Breton presenta en más de una ocasión en este libro escenas de sueños que ha tenido o escenas de la realidad que parecen sueños, por sus coincidencias casuales y sus asociaciones libres de toda lógica racional.

Trabajo y lucha obrera como motivos

Según el narrador de la historia y autor del libro, Nadja es de clase baja, puesto que se muestra con ropas humildes y sin dinero. Al mismo tiempo, cuando la internan en un hospital psiquiátrico, Breton afirma que su situación y tratamiento serían muy distintos si ella no fuera pobre.

A su vez, en las conversaciones que suelen tener ambos en los cafés, suelen exponer sus pareceres en torno al trabajo. Breton considera que es algo que hay que hacer de modo obligado, para subsistir, pero no es que le encante la idea de tener que hacerlo, pues es en sí mismo esclavizante. En este sentido, el trabajo y la lucha obrera aparecen como motivos en esta obra, en tanto que se pone de relieve que los obreros realizan tareas mecánicas y reductoras de su libertad de acción y pensamiento. A su vez, Nadja le dice que trabajando tanto como lo hacen, les es imposble siquiera tener el tiempo o la energía para plantearse la posibilidad de una vida distinta o mejor.

“La flor de los amantes” como símbolo de lo vivido por Nadja y André.

"Tuvo la visión de esa flor en el transcurso de una comida campestre y vi cómo se esforzaba por reproducirla muy torpemente. Más adelante volvió a intentarlo vanas veces para mejorar su trazo y dar a las dos miradas una expresión diferente. En sustancia, bajo este signo debe ser enfocado el tiempo que pasamos juntos y sigue siendo el símbolo gráfico que le dio a Nadja la clave de todos los demás".

Luego de varios encuentros, Nadja, que es dibujante, realiza una obra que representa el vínculo entre ella y Breton. El narrador dice que ha tenido esta visión en una salida campestre que han compartido y también que luego siguió dibujando otros símbolos a partir de este.

Actualice esta sección!

Usted puede ayudarnos revisando, mejorando y actualizando esta sección.

Actualice esta sección

Después de reclamar esta sección, usted tendrá 24 horas para enviar un borrador. Un editor revisará lo enviado y puede publicar lo enviado o dar retroalimentación.

Cita esta página