Personas mayores/extraños pájaros (símil en "La palabra sagrada")
“[las personas mayores] parecían extraños pájaros habitantes de un planeta vacío y desconocido en medio de esta alcoba infantil, inocente, candorosa, un poco como Gulliver junto a los reducidos muebles de niña”.
Desde el punto de vista de Alicia, sus mayores son comparados con pájaros ajenos a su habitación de niña inocente. Este símil los hace ver como personas demasiado grandes para ese ambiente, aunque esta comparación es un tanto irónica, ya que ella no es en sí misma tan chica como la creen los demás.
Padre de Alicia/pájaro singular (metáfora en "La palabra sagrada")
“Su padre, una sombra curiosa, un pájaro singular, un negro Gulliver con los hombros agudos, un pájaro flaco y feo, se puso en pie y en seguida tiró de la cortina para disipar aquella raya de sol que caía sobre la almohada”.
Continuando el símil de la entrada anterior, en este caso el padre de Alicia es directamente equiparado con un pájaro gigante en ese espacio de niña, pequeño y supuestamente incólume. El hombre intenta disminuir todo malestar a la niña, ignorando la verdadera conducta de su hija y que no ha sido abusada tal como se cree.
Atmósfera/alud sólido (símil en "La frontera increíble")
“Hundida dentro de la atmósfera, como si la atmósfera fuese un alud sólido, de tierra, y ella se encontrara en el fondo, lejanísima, audible apenas”.
La esposa del moribundo se siente como si estuviera habitando una atmósfera cubierta de tierra y sofocación. A la espera de la muerte de su marido, se halla distante, como tratando de comprender y a la vez de protegerse de la irremediable situación.
Luz del sol a través de los vitrales/cuchillada de sangre (metáfora en "La hermana enemiga")
“La casi negra cuchillada de sangre de uno de los vitrales degollaba la imagen de un santo, cuyos ojos habían adoptado una expresión atónita y sorprendida, diríase como si no comprendiera esa injusticia inesperada de su propio degüello”.
En una crítica velada hacia la institución de la Iglesia, esta metáfora equipara la luz que ingresa del exterior a través de los vidrios de colores de los ventanales con una cuchillada de sangre. Esta metáfora parece presagiar, a su vez, el destino funesto que sufrirá la niña al suicidarse por sentirse culpable y desdichada.
Prostitutas y tripulantes/astrónomo y cuerpo cósmico (símil en "Dormir en tierra")
“Entre las prostitutas y los tripulantes del barco existía aquella prerrelación íntima, concreta, casi doméstica y familiar, que existe entre el astrónomo y el cuerpo cósmico que inevitablemente entrará en la órbita de la tierra y que entonces se volverá de inmediato un sujeto palpitante y real –largamente destinado a que el hombre lo posea- bajo la primera mirada terrestre”.
En este caso, el narrador del último cuento desarrolla un símil entre el vínculo de prostitutas y tripulantes con el vínculo de los astrónomos y los objetos cósmicos que observan. En ambos casos, se trata de una atracción que no puede evitarse, de tal modo que tanto astrónomos como tripulantes querrán poseer a los cuerpos del mismo modo.