Luciérnagas es una novela que toma como escenario la Barcelona de la Guerra Civil. La acción transcurre desde el inicio del conflicto bélico hasta su finalización.
Soledad Roda Oliver, apodada Sol, es una joven de familia burguesa, conservadora y católica que, cuando comienza la novela, está hojeando su cuaderno de bachillerato y recordando sus días allí. Vive junto a su padre, su madre, su hermano y su niñera en un piso de Barcelona. El año en el que termina sus estudios en el prestigioso internado de monjas Saint-Paul conoce, durante las últimas vacaciones, a Ramón Boloix, un hombre de alrededor de cuarenta años y profesor de su hermano, que se convierte durante ese tiempo y hasta que su abuela le prohíbe volver a verlo, en su confidente y amigo.
La guerra estalla y desestabiliza a todos los miembros de la familia. El padre de Sol es asesinado; sus talleres, fuente de ingreso de la familia, son confiscados y se ponen al mando de los mismos los antiguos trabajadores organizados; en la casa todos comienzan a pasar hambre y necesidades, por lo que deben vender sus bienes y sumarse a las largas colas de gente para recibir algo de alimento; el hermano empieza a ausentarse cada vez más del hogar; una familia de refugiados madrileños se muda a un sector de la casa por orden de los revolucionarios. Sol consigue un empleo como maestra en una Escuela Roja, gracias a los contactos de Cloti, la joven refugiada que se aloja en su casa. El director resulta ser Ramón Boloix, que ahora es un mutilado de guerra. Sol trabaja un corto tiempo allí, dado que Ramón intenta propasarse, y ella decide abandonarlo todo.
Eduardo, el hermano de Sol, traba amistad con un grupo de jóvenes con los que se convierte en cómplice de sus robos y saqueos. Se muda con Chano, uno de ellos, a una barraca en la ladera del Tibidabo. Un día, Sol asiste con él a la casa del otro de ellos, Daniel Borrero, dado que Eduardo quiere visitarlo porque el chico está muy enfermo. Allí, Sol conoce a Cristián Borrero y, desde un primer momento, se acerca a él. A pesar de sus diferencias, ambos se sienten unidos y conectados. Esa noche, la tragedia se hace presente en ese hogar: Daniel muere; un bombardeo destruye la casa, por lo que Pablo, el hermano mayor de Daniel y Cristián, resulta herido y se suicida; el padre, al parecer, también yace entre los escombros.
En ese momento, Sol y Cristián se sienten conectados y unidos para siempre. Juntos se esconden en Sarriá, en la casa de Pablo, durante algunos días, y viven un intenso amor que los hace perder noción del tiempo. Un día llegan unos soldados que los trasladan y los llevan presos, por lo que ambos pierden contacto.
Cuando Sol sale de prisión, regresa a su casa y se entera de que su hermano está internado en el hospital, debido a que la noche del bombardeo fue gravemente herido. Ella le cuenta a su madre que está enamorada de Cristián y que debe buscarlo. Está embarazada. Chano le informa que Cristián la está esperando recluido en su barraca, por lo que ella va a su encuentro. Los dos piensan que ahora, que la guerra está terminando, por fin serán felices, pero, a la mañana siguiente, una bala perdida, que los encuentra mientras caminan por una carretera con destino a su nueva vida, mata al muchacho.