-
1
¿Cuáles son las principales estrategias y los argumentos más contundentes de la denuncia de Walsh?
En primer lugar, Walsh recurre a la cuestión de la hora para indicar que los fusilamientos de José León Suárez fueron clandestinos, puesto que la ley marcial se aplicó sobre civiles detenidos antes de su promulgación. En relación con esto, la estrategia del periodista es demostrar que los propios acusados son los que proveen la información necesaria para su condena: ellos mismos afirman que la detención se realizó a las 11pm del 9 de junio, mientras la ley se promulgó a las 0.30am del 10 de junio.
Al momento de publicar Operación masacre por primera vez, el juicio abierto por la denuncia de Livraga todavía está en proceso, y para Walsh es muy importante que su libro sirva a la causa. Por eso, otra de sus estrategias es centrarse exclusivamente en la masacre de José León Suárez, y no en las otras ejecuciones de aquellos días, que le parecían igual de bárbaras y arbitrarias. Luego de que la causa quede impune, Walsh cambia de estrategia e incluye estos fusilamientos en una denuncia más amplia, en la que acusa al gobierno de la Revolución Libertadora de llevar a cabo una política de represión, tortura y asesinato.
-
2
Analizar los recursos literarios que utiliza Walsh para describir el horror de la masacre y sus consecuencias
La escena de la matanza es el momento del relato más cargado de suspenso. Previo al tiroteo la narración se desacelera, describiendo el modo en que los detenidos avanzan en la oscuridad del basural, iluminados por los reflectores de la camioneta. Luego, cunde el pánico y reina la confusión, que se representa desde las diferentes perspectivas de los sobrevivientes, mientras aumentan las imágenes de la violencia y del terror. No podemos saber con certeza cómo murieron los que no se salvaron, pero incluso en la conjetura aparece el horror, como cuando Walsh recoge del testimonio de Gavino afirmando que pudo haber sido Lizaso aquel que da “un alarido aterrador, que perfora la noche y parece prolongarse hasta el infinito” (94).
La cuestión del tiempo y su duración eterna aparece también en el capítulo “El tiempo se detiene”, que recupera el momento interminable en el que Di Chiano espera el tiro de gracia. Asimismo, el tiempo es un recurso clave para reconstruir las consecuencias de la masacre, en especial en el caso de Giunta, que vive en su cabeza la matanza una y otra vez, como si estuviera viendo una película que se reproduce en loop.
-
3
¿Hasta qué punto se puede afirmar que en Operación masacre la realidad supera a la ficción? Justifica tu respuesta
Para denunciar las atrocidades que padecen las víctimas de José León Suárez, Walsh hace hincapié en su carácter excepcional, que hace que la historia parezca sacada de un relato de ficción. Por un lado, la narración nos muestra cómo personas con las que el lector puede identificarse son sometidas a una experiencia de tortura y de muerte completamente extremas, como se ve particularmente en los casos de Giunta y de Livraga, que sin haber tenido ninguna relación con el levantamiento, terminan sufriendo condiciones inhumanas en la cárcel. Por otro lado, todas las irregularidades del operativo también parecen increíbles, porque permiten que varios de los detenidos se escapen y puedan contar su historia, como la del “fusilado que vive”, que atrapa a Walsh y lo lleva a investigar. Estas experiencias límite rodean lo fantástico, porque nos llevan a cuestionar lo que entendemos por real en nuestra vida cotidiana, en la que nadie espera vivir en carne propia lo que estas personas vivieron. En este sentido, podemos afirmar que en Operación masacre la realidad supera a la ficción.
-
4
Elegir tres momentos del relato que pongan en evidencia la conversión ideológica del autor
La primera escena bisagra en el tema de la conversión ideológica del autor es la del prólogo, en la que Walsh sale del ámbito cerrado del ajedrez hacia la calle, para involucrarse en los acontecimientos que sacuden al país. Esta escena finaliza simbólicamente en el momento en que el periodista dice que escucha el relato increíble del fusilado que vive y le cree “en el acto” (19), asumiendo de este modo su compromiso con la causa. El intelectual comprometido escribe entonces Operación masacre porque quiere que se haga justicia; en 1957, cuando sale la primera edición, el juicio de Livraga está abierto y Walsh cree que su libro puede servir de evidencia para dar con los culpables.
Sin embargo, a medida que pasan los años y la causa queda impune, el autor va asumiendo una posición cada vez más decepcionada con las instituciones democráticas, lo que lo lleva a decir en el epílogo de la edición de 1969 que “dentro del sistema, no hay justicia” (224).
Finalmente, en los dos últimos capítulos del libro, que son agregados en 1969 y 1972, Walsh toma una actitud aprobatoria de la justicia a mano propia, a la que llama “juicio histórico”, que se cobra Montoneros al secuestrar y asesinar al teniente general Aramburu, presidente de facto en el momento de los fusilamientos clandestinos. Este tercer momento representa el pasaje de Walsh de intelectual comprometido a intelectual revolucionario.
-
5
¿De qué manera se reconstruyen en la narración los aspectos no esclarecidos de la investigación?
Una de las características del género no-ficción es reconstruir el relato de los hechos sin perder de vista la instancia de la investigación. Walsh procede de esta manera cuando pone en evidencia las “lagunas” de su reconstrucción de los hechos, aquello que no pudo corroborar con certeza, como la cuestión de si había más personas en la casa de Florida que fueron luego detenidas. A veces, el escritor realiza conjeturas y despliega en su relato varias posibilidades; esto hace, por ejemplo, cuando imagina un diálogo probable entre Carranza y Garibotti, de quienes no tiene testimonio directo, porque ambos mueren en el basural. Pero también acude a otro tipo de recurso más característico de la novela realista, el estilo indirecto libre, en el que toma el punto de vista de un personaje y reconstruye sus pensamientos sin abandonar la tercera persona. Esto hace cuando repone lo que pudo haber pensado Carranza en el momento de la detención, o cuando imagina el tormento interno de Rodríguez Moreno. Este procedimiento apela más a lo verosímil, a lo que es posible, que a lo verdadero, a lo que sabe que en efecto sucedió.