"... su relación con él era como estar a gusto en una casa pero pasarse el día sentada junto a la ventana, mirando afuera" (Narrador, p. 12) (Símil)
Esta comparación expresa la ambigüedad que experimenta Ifemelu en su noviazgo con Blaine. Por un lado, con él está cómoda; se siente segura, cuidada y querida; lo admira, y aprende de él. Pero por otro, no siente una satisfacción completa, porque esa comodidad le resulta insuficiente; es como si mirara para afuera por la ventana porque está buscando otra cosa, otra forma del amor, la que ha conocido junto a Obinze, por quien siente un amor romántico pleno.
"El mundo estaba envuelto en gasa..." (Narrador, p. 152) (Metáfora)
Para Ifemelu, los primeros tiempos en Estados Unidos son abrumadores: debe enfrentarse por primera vez a una compleja serie de dificultades, en un contexto especialmente hostil para las personas como ella, migrante, joven, negra y africana. En particular, cuando no consigue trabajo y sus ahorros se van consumiendo, siente que no puede ver las cosas con claridad, y eso expresa la metáfora citada: ve el mundo que la rodea como si estuviese cubierto por una tela fina; le cuesta identificar los significados de muchas cosas, no sabe cómo actuar y le cuesta despejar su mente para pensar.
"Sentía un deseo voraz de comprenderlo todo sobre Estados Unidos, de vestirse una nueva piel de conocimiento inmediatamente..." (Narrador, p. 157) (Metáfora)
Al empezar la universidad, Ifemelu todavía sostiene una visión idealizada de Estados Unidos, y quiere aprenderlo todo sobre su cultura; formar parte de su sociedad; incorporar sus ideas, conocimientos, modos de hablar, consumos, gustos y preferencias. A través de la metáfora de vestir una nueva piel, la novela expresa cómo la adaptación de una persona migrante a una cultura y una sociedad diferentes afecta su identidad, su personalidad, su modo de estar en el mundo.
"Con su jersey dorado ceñido a un talle increíblemente estrecho por medio de un cinturón, su pelo dorado, sus zapatos llanos dorados, ofrecía un aspecto inverosímil, como un rayo de sol" (Nararador, p. 170) (Símil)
Esta cita encadena una serie de imágenes visuales que describen a Kimberly como una persona de color dorado, y luego la compara con un rayo de sol. El símil presenta tanto el aspecto físico de esta mujer blanca y rubia, como su posición social, ya que es rica y su vida está rodeada de abundancia. Además, se trata de una comparación muy positiva, porque refleja la personalidad de esta mujer: Kimberly tiene un gran corazón; es bondadosa, amable, alegre y simpática. Si bien tiene algunos gestos problemáticos por ser una mujer extremadamente privilegiada, siempre trata muy bien a Ifemelu, es geneorsa con ella, la ayuda en todo lo que puede, y ellas se convierten en buenas amigas.
"Alisarse el pelo es como estar en la cárcel" (Wambui, p. 243) (Símil)
Mediante este símil, Wambui comparte con Ifemelu su postura política con respecto al cabello crespo e intenta ayudarla para que se libere de los mandatos racistas. Esta cita forma parte del diálogo que ambas amigas tienen cuando Ifemelu debe cortarse el pelo muy cortito porque los químicos para el alisado le han dañado el cuero cabelludo. La comparación es fuerte y efectiva porque denuncia cuán racista es el hecho de que las mujeres negras se vean obligadas a alisarse el pelo en determinados ámbitos, como el trabajo, y lleguen a lastimar sus cuerpos con tal de cumplir con esos requisitos de la sociedad occidental dominada por las personas blancas. De acuerdo con Wambui, esa presión encierra a las mujeres negras en una cárcel, es decir, las priva de su libertad, les impone límites y las lastima como personas.