Resumen
Capítulo 3
La narración vuelve a ubicarse en el salón de trenzado. Las peluqueras se organizan para pedir el almuerzo. Entonces, Ifemelu piensa en sus padres. La protagonista recuerda lo hermoso que era el cabello de su madre cuando ella era una niña. Sin embargo, cuando Ifemelu tiene diez años, la madre llega a casa y se corta repentinamente el pelo hasta quedar casi rapada. Esto se debe a que se ha unido a una nueva iglesia y está convencida de que debe llevar una vida austera, de abstinencia. En esa época deja de alimentarse bien. El Domingo de Pascua de ese año la madre cree ver un ángel y este le dice que debe abandonar esa iglesia. Entonces pasa por otras religiones y se suma a una llamada Asamblea de la Guía. Si bien los fieles procuran que Dios sea fuente de bendiciones y prosperidad, el pastor usa las donaciones para llevar una vida de lujo; tiene una mansión y muchos autos. Al final, Ifemelu dice que no se preocupa por esa contradicción, porque la mamá ha vuelto a comer bien y sus ojos han recuperado la luz.
Por esos años, cuando todavía ambas viven en Nigeria, Ifemelu tiene una relación estrecha y de complicidad con su tía Uju. Esta es amante del General, un militar poderoso muy ligado al gobierno de turno. El General consigue un trabajo en el hospital para Uju, que es médica, aunque hay muy pocas plazas disponibles. El sueño de la tía es fundar su propia clínica privada, pero no puede hacerlo por las condiciones políticas y económicas que atraviesa el país. En ese contexto, el padre de Ifemelu se queda sin trabajo. La madre pasa a ser el sostén de la familia con su salario como vicedirectora de una escuela. Al principio, el padre busca empleo, pero luego pierde la voluntad y se pasa todo el día tirado en el sofá. Ifemelu entonces recuerda la constante frustración de su padre por no haber accedido a la educación universitaria. Para compensar esa sensación de falta, se preocupa mucho por usar la lengua correctamente, y se expresa con palabras complejas y grandilocuentes. Saltando nuevamente en el tiempo, la protagonista recuerda que pocos meses después de que el padre perdiera el trabajo recibieron reclamos por falta de pago del alquiler, lo cual la impactó, porque nunca había sucedido antes, y ella no había percibido cuán mala era la situación. La tía Uju suele estar en casa con ellos y pasa mucho tiempo con la protagonista; las une un lazo especial. A medida que Ifemelu crece, la tía Uju se convierte en una especie de segunda madre; la acompaña y le enseña cosas importantes, y ellas hablan de muchos temas que la madre solo encara desde un punto de vista religioso, como la menstruación y el sexo.
Capítulo 4
La memoria de Ifemelu vuelve a concentrarse en Obinze. Se narra el momento en que se conocen por primera vez, en una fiesta en la casa de Kayode, cuando son adolescentes. Van a la misma escuela y tienen amigos en común. Si bien todo parece indicar que Obinze querrá salir con Ginika, amiga de la protagonista, este se siente realmente atraído por Ifemelu. Esa noche bailan juntos, y después tienen una larga conversación. Él le cuenta un secreto sobre su madre, que ha sufrido violencia de género en su antiguo trabajo en la Universidad de Nsukka, y por eso se ha mudado con él a Lagos. Ifemelu y Obinze mantienen esta charla en igbo y luego se besan por primera vez. Pocas semanas más tard,e él le declara su amor y ella le corresponde el sentimiento.
Capítulo 5
Por un tiempo, la relación de Ifemelu y Ginika está tensa, pero de pronto la amiga anuncia que se mudará con su familia a Estados Unidos, y "la marcha de Ginika las obligaba a las dos a escurrir a fondo su amistad y, una vez renovada, tenderla a secar, para volver al punto donde estaban antes" (77). Ambas se juntan con otras chicas mientras Ginika se prepara para el viaje. Conversan, se reparten la ropa que la chica no llevará consigo y hacen bromas sobre la posibilidad de que se convierta en una "americanah" (78). La voz narradora entonces explica el significado de esa palabra: es un término usado para referirse a una persona que migra desde Nigeria hasta Estados Unidos, abandona sus costumbres natales y se comporta como si fuera estadounidense. Otro día, en el colegio, las chicas se reúnen con Obinze y los amigos varones. Varios pertenecen a la clase adinerada. Conversan sobre los pasaportes y la posibilidad de tener documentos extranjeros para viajar con mayores facilidades. Uno de los chicos, Emenike, viene de una familia muy pobre pero dice que su padre lo mandará a estudiar a Estados Unidos cuando termine el colegio. Todos saben que es una mentira y se ríen de un modo que hiere a Emenike.
Ifemelu y Obinze pasan muchísimo tiempo juntos. Él se siente fascinado por Estados Unidos. Le recomienda a su novia literatura de ese país y le habla de su cultura. Un día, la invita a su casa para presentarle a la madre. Ifemelu se siente entusiasmada y nerviosa al mismo tiempo; para ella, almorzar con la madre del novio es algo poco frecuente tan pronto en la relación. Cuando la conoce, cree que es una mujer sumamente hermosa y admira cómo lleva el pelo en un afro grande; Ifemelu se siente encantada, la considera inteligente y elegante. La madre le pregunta qué quiere decir el nombre "Ifemelu" y luego cocina para los tres. Mientras tanto, conversan sobre literatura. La protagonista comienza a frecuentar la casa y, un día, la madre la separa para conversar a solas: le habla de las relaciones sexuales y le pide que sea responsable; la mujer asegura que las chicas son más sensatas que los varones, y por eso habla directamente con ella y no con su hijo.
Capítulo 6
Ifemelu vuelve a pensar en la relación de la tía Uju y el General. Aunque Uju es una mujer enérgica con una buena educación, ha llegado a un punto de su vida en que lo único que le interesa es ser atractiva y estar disponible para el General. Él está casado y tiene hijos, pero paga para que Uju lleve una vida de lujo, en una gran casa y rodeada de sirvientes. Ella aprovecha el dinero para hacerle regalos a la familia de Ifemelu, e incluso paga el alquiler de su departamento cuando el padre está sin trabajo. Para su sorpresa, un día Ifemelu se entera de que el General solo le da pequeñas cantidades de dinero a Uju, y que ella no recibe un pago por trabajar en el hospital. A Ifemelu el General no le cae nada bien, y no le gusta ver a su tía en esa posición sumisa. Sin embargo, Uju está muy involucrada en la relación. Después de un tiempo, Uju queda embarazada y decide tener el bebé. Le cuenta a Ifemelu que ha abortado cuando estaba en la universidad y no quiere vovler a hacerlo. Junto al General, se organizan para que el bebé nazca en Estados Unidos. Cuando nace Dike, Uju le pone su propio apellido, no el del padre. Un año más tarde, el hombre muere en un choque de aviones que puede haber sido un atentado. La familia del General se apresura para quedarse con todas las riquezas, y Uju pierde su posición económica.
Capítulo 7
La narración vuelve a seguir la historia de amor de Obinze e Ifemelu. Cuando terminan la secundaria, quieren estudiar en la Universidad de Ibadan, pero la madre de Obinze tiene problemas de salud y él decide estudiar en la Universidad de Nsukka para estar cerca de ella. Ifemelu decide acompañarlo. Al principio, la vida universitaria es buena. Ella se hace popular rápidamente y muchos chicos la consideran atractiva. Sin embargo, Nigeria empieza a atravesar períodos de huelgas docentes muy extensas, al punto que las universidades quedan cerradas. Ifemelu regresa un tiempo a la casa de su familia en Lagos y se separa de Obinze. Ella lo llama desde la casa de Ranyinudo porque en la suya no hay teléfono. Cuando retoman las clases, vuelven a verse a diario, y en esa época tienen sexo por primera vez. Ella se preocupa porque le ha prometido a la madre de Obinze contarle antes de tener relaciones, pero no lo ha hecho. Una semana después, siente náuseas y cree que está embarazada. En realidad, tiene una inflamación en el apéndice. La madre de Obinze la ayuda a recibir atención médica y le realizan una operación sencilla. Para agradecerle, los padres de la protagonista viajan a Nsukka y conocen a la madre del novio. Unos días después, esta habla con ambos sobre salud sexual y reproductiva.
Capítulo 8
Esos meses, las huelgas se mantienen de manera intermitente y muchos jóvenes intentan irse a estudiar a otros países. Obinze estimula a Ifemelu para que se postule a una universidad en Estados Unidos. Ella entra y consigue una visa sorprendentemente rápido. La tía Uju ya está instalada en aquel país y le da consejos para preparase. Obinze planea graduarse primero en Nigeria y luego migrar para juntarse con Ifemelu.
Capítulo 9
La narración regresa al presente del salón de trenzado. Llega la comida china que las peluqueras han pedido y almuerzan. Comienza una nueva película nigeriana en la televisión. Los aromas de la comida, junto con el extremo calor que hace adentro y afuera del lugar, hacen que Ifemelu piense en su primer verano en Estados Unidos, tiempo que pasó en Brooklyn. Al llegar se sintió muy sorprendida por la temperatura; en Nigeria creció imaginando que en el "extranjero" (121) siempre hacía frío. También se impactó con la suciedad y la cantidad de personas pobres que encontraba en la calle. En Brooklyn la recibe la tía Uju, a quien encuentra muy cambiada. Los primeros días conoce a Alma, la niñera de Dike. Al principio piensa que es una mujer blanca, ya que en Nigeria sería clasificada de esa manera, pero luego se entera de que Alma, en Estados Unidos, es considerada "hispánica". A partir de ese recuerdo, la narración presenta un post del blog que Ifemelu comenzará a escribir más adelante. En este caso, el texto se titula "Comprender Estados Unidos para los negros no estadounidenses: qué significa 'hispano'" (123), y en él analiza cómo se trata de un término que refiere tanto a una etnia como a una raza.
Capítulo 10
Para Ifemelu, ese verano está caracterizado por la espera: recién en el otoño comenzará el semestre y pasará a vivir y estudiar en la universidad. Cree que allí conocerá el verdadero Estados Unidos, el país rico que siempre imaginó. Mientras tanto, se hace cargo de los cuidados del pequeño Dike, ya que Uju tiene tres trabajos y, al mismo tiempo, estudia para los exámenes que le permitirán practicar la medicina en Estados Unidos. Ifemelu y Dike construyen una relación de mucho amor y cercanía. A ella le llaman la atención sus hábitos marcadamente estadounidenses. También se espanta porque cree que aprende poco en la escuela. El sistema educativo estadounidense la decepciona, y le enseña matemática a Dike en casa por su cuenta. Además, le enseña algunas costumbres nigerianas, como comer banana con ahuacates. En esta época se hace amiga de Jane, una vecina de Granada, pequeño país caribeño; ambas han tenido infancias semejantes y ahora comparten experiencias como migrantes.
Capítulo 11
La tía Uju comienza a salir con un hombre llamado Bartholomew, un nigeriano que vive en Massachusetts, es decir, en un estado diferente del país, pero no demasiado lejano. A Ifemelu este hombre le cae mal instantáneamente. Se da cuenta de que usa cremas para blanquear su piel, le molesta la poca atención que le presta a Dike y está en desacuerdo con sus opiniones políticas. Él tiene una perspectiva machista y la ignora. En esta época, llegan los resultados del examen de habilitación de Uju: lo ha aprobado y, por lo tanto, puede empezar a trabajar como médica. Ifemelu se alegra mucho y festejan juntas. Entonces Uju le dice que debe sacarse las trenzas y alisarse el cabello porque, de lo contrario, no conseguirá trabajo. Ifemelu no puede creerlo, pero Uju le asegura que, en Estados Unidos, "Si llevas trenzas, te consideran poco profesional" (139). El verano llega a su final y la protagonista se prepara para la universidad. Está ansiosa, pero también la entristece separarse de Dike. La tía Uju le entrega documentos que pertenecen a otra mujer negra, llamada Ngozi Okonwo, para que pueda trabajar y manejar automóviles. Ifemelu se siente nerviosa y asegura que Ngozi y ella no se parecen en nada: será evidente que esos documentos no le pertenecen. Pero Uju responde: "Para los blancos, somos todos iguales" (140).
Análisis
Las memorias de la madre y el padre de Ifemelu permiten iluminar dos aspectos centrales de la novela, y de gran relevancia para la vida de la protagonista. En primer lugar, a través de la madre, se enfatiza la relevancia del cabello en relación con la identidad, la belleza y el estado psíquico y emocional de las mujeres. La madre tiene un pelo hermoso, e Ifemelu crece admirándolo, pero cuando la mujer pasa por un mal momento decide cortárselo y la hija se impresiona. Este recuerdo es narrado con detenimiento, demostrando cuán importante ha sido para la protagonista. En segundo lugar, a través de la figura paterna, se destaca el tema de la educación: el padre acarrea un sentimiento de frustración por no haber podido estudiar en la universidad. Es por ese motivo que, para compensar esa sensación de falta, se preocupa por hablar de manera muy correcta y usar palabras sofisticadas. Además, estimula a Ifemelu a avanzar en sus estudios, ya que los títulos académicos garantizan una mejor posición socioeconómica.
La chica adopta esa valoración de la educación, y cuando sus estudios en Nigeria se ven interrumpidos por las largas huelgas, se organiza para migrar y estudiar en una universidad de Estados Unidos. Esta secuencia ofrece un breve retrato de la inestabilidad política y económica del país africano, asunto que Chimamanda Adichie ha trabajado en mayor profundidad en sus novelas previas, La flor púrpura y Medio sol amarillo.
Por otra parte, un aspecto central de esta serie de capítulos es la valoración de los Estados Unidos que tienen los jóvenes nigerianos. En particular, Obinze siente fascinación por el país norteamericano, sus ciudades y su cultura. Para él, Estados Unidos representa el futuro, la belleza y el progreso. De hecho, en determinados momentos, para elogiar la hermosura de Ifemelu, le dice que parece una "negra estadounidense" (80). Si bien Obinze sabe mucho sobre este país, se destacan sus conocimientos de literatura, y siempre le recomienda lecturas a Ifemelu, como Huckleberry Finn. Ahora bien, la realidad de muchos jóvenes de clase media como ellos consiste en migrar, y la mayoría lo hace a otros países de habla inglesa, entre los que se destacan Estados Unidos e Inglaterra. Tanto es así que entre las amigas de Ifemelu se hacen chistes usando el término "americanah" cuando saben que alguna está por irse al extranjero. La palabra se refiere a las personas nigerianas que migran a Estados Unidos, abandonan su cultura natal y adoptan de manera exagerada las costumbres del nuevo país. El hecho de que la novela se titule Americanah nos da la pauta de que las valoraciones de Estados Unidos desde el exterior, la migración y los modos en que esta afecta la identidad son cuestiones que están en el núcleo de la obra.
Sin embargo, cuando llega a Brooklyn, Ifemelu se siente decepcionada porque la realidad no coincide con la imagen idealizada de Estados Unidos: ve suciedad, precariedad, delincuencia y racismo. De todas maneras, no abandona sus expectativas: cree que cuando termine el verano y se mude a Filadelfia para estudiar en la universidad, conocerá "el verdadero Estados Unidos" (130), el de las publicidades donde el consumo hace que las personas vivan de manera plena y feliz.
Otro punto importante de los relatos sobre la adolescencia de Ifemelu y Obinze es la sexualidad: dado que la novela, entre otras cosas, cuenta cómo crecen y llegan a ser adultos, esta cuestión es muy significativa. Ese proceso de maduración se presenta como un tira y afloje: por un lado, están creciendo, pero, por el otro, todavía tienen inseguridades y no saben lidiar del todo bien con el sexo. Esto queda claro cuando, una semana después de su primera relación con penetración, Ifemelu cree estar embarazada y ambos se asustan mucho. Si bien se trata de una falsa alarma, a continuación ambos requieren de ayuda y cuidado de los padres (dado que Ifemelu debe operarse del apéndice) y, además, la mamá de Obinze los reta por no haberse cuidado lo suficientemente bien. Es decir, la madurez alcanzada para tener sexo contrasta con el acompañamiento que todavía necesitan de los adultos, como si todavía fueran niños en ciertos aspectos. De esa manera, la novela relata con sensibilidad algunos desafíos propios de la adolescencia. Ahora bien, la secuencia también marca la desigualdad de género que envuelve los vínculos entre varones y mujeres heterosexuales en esta obra, ya que antes de que Ifemelu y Obinze tengan sexo, la madre de este habla con la chica y le dice que es ella quien debe encargarse de ser responsable, porque las mujeres son "más sensatas" (86) que los varones. Si bien la mujer le habla con afecto y confianza, procurando el bienestar de todos, lo cierto es que le exige más a Ifemelu que a su propio hijo en este aspecto.
Por último, es preciso destacar que en el Capítulo 9 leemos por primera vez un fragmento del blog de Ifemelu. En este caso, se trata de un análisis y una explicación del concepto de "hispano" en Estados Unidos, que es tanto una raza como una etnia y que, de manera general, sirve para identificar a las personas de países latinoamericanos que hablan español. Hoy en día es más frecuente el uso del término "latino/a" o incluso "latinx" para hablar de esas personas, pero la novela usa la palabra "hispano". A partir de este punto, la narración se interrumpirá en repetidas ocasiones para dejar espacio a la escritura de la propia protagonista. Las entradas del blog nos permiten conocer las experiencias y, sobre todo, las opiniones de Ifemelu directamente en primera persona, sin mediación de la voz narradora.