Se ha mencionado que Primero Sueño es un homenaje explícito a la obra poética de Luis de Góngora y Argote llamada Soledades. En el título original del poema de Sor Juana, aportado por sus editores, leemos: “Primero Sueño, que así intituló y compuso la madre Juana Inés de la Cruz, imitando a Góngora”. Así, desde la propia escritura del poema y desde sus primeras lecturas, Sor Juana Inés de la Cruz se inscribe en la corriente literaria llamada gongorismo, característica del siglo XVII en la poesía castellana.
Es posible identificar movimientos similares al gongorismo en otras regiones de Europa y en otras lenguas europeas en el mismo período, pero, sin dudas, este se destaca dentro de la literatura castellana, que, además, se encuentra atravesando su Siglo de Oro. El movimiento también se denomina "culteranismo". En la época de Góngora, este nombre es utilizado despectivamente por escritores de otras corrientes. El significado común en la actualidad de la palabra "culto" como sinónimo de "estudioso" y "erudito" tiene sus orígenes en la literatura de Góngora. En aquella época se refiere particularmente a la alta complejidad de esta poética, que usa vocablos sofisticados al tiempo que retoma saberes científicos y mitologías clásicas. La dificultad de los poemas surge de ese uso de la lengua, y sirve para darle importancia y solemnidad a las obras. El estilo de la escritura cobra mucha relevancia en esta corriente literaria. Su estética se relaciona con lo amplio, lo abundante, lo excesivo, lo extenso, lo exagerado e incluso lo repetitivo.
Debido a esas características, muchos escritores españoles célebres del Siglo de Oro se distancian de la poética de Góngora e incluso lo acusan de corromper la lengua castellana. Sin embargo, es muy bien recibido entre los autores de Nueva España. Es decir que esta poética, que busca explotar al máximo la expresividad, tiene muchos herederos entre los poetas americanos (o españoles que viven en América), tales como Carlos de Sigüenza y Góngora, Juan Carnero, Francisco de Castro y la propia Sor Juana.
El gongorismo como movimiento integra obras en las que abundan los latinismos y helenismos (es decir, palabras tomadas del latín y el griego o derivadas de estas lenguas clásicas), las metáforas y una gran complejidad sintáctica relacionada con la figura retórica del hipérbaton. Estos recursos tienen el objetivo de expandir la expresividad de la lengua y de darle una musicalidad expresiva a la poética. Todas estas características se hacen presentes con nitidez en Primero sueño.
Una de las marcas más estructurales del gongorismo en Primero sueño es el uso de la forma poética silva intercalando versos heptasílabos y endecasílabos. Se trata de la misma forma elegida por Góngora para Soledades. Se han analizado los usos de latinismos y helenismos, hipérbaton y metáforas de este poema. Pero, además, la intertextualidad con las Soledades de Góngora puede leerse explícitamente en algunos versos y pasajes del poema sorjuanino.
Por ejemplo, uno de los primeros versos de Sor Juana indica "escalar pretendiendo las estrellas" (Primero sueño, v. 4) y es una imitación directa del verso "escalar pretendiendo el monte en vano" (Soledades I, v. 13), de Góngora. Otro ejemplo es la imagen visual de los murciélagos formando una nube (Primero sueño, vv. 39-44) tomada de Soledades II, que refiera a "la disonante niebla de las aves" (v. 894). Un giro muy particular en Primero sueño es la introducción de la pregunta "¿Por qué?" (v. 696) para dar inicio a una reflexión intelectual en relación al elogio del Hombre. En Soledades II, Góngora hace el mismo uso de la misma pregunta (v. 662). Otro giro muy gongorino se puede leer en el verso "o mal, o nunca, o tarde" (v. 769) de Primero sueño.
En otra obra, llamada Polifemo, Góngora alude a la "infame turba de nocturnas aves, / gimiendo tristes y volando graves" (vv. 39-40), y estos versos se espejan con "sumisas sólo voces consentía / de las nocturnas aves, tan obscuras, tan graves" (vv. 21-23) de Primero Sueño. Como puede verse, la imitación no es una copia superficial, sino que la monja reelabora los conceptos con originalidad y de acuerdo con sus propias visiones. Si en Polifemo la presencia de las aves parece molesta y su sonido, desagradable, en Primero sueño se trata siempre de un canto ameno, armónico y bello. La copia formal y estilística no significa una falta de originalidad.
Es importante destacar, para concluir, que Sor Juana homenajea a Góngora como su maestro y su modelo literario a través de este reconocimiento. La imitación es una parte fundamental del proceso creativo de escritura en la época y no representa una falta de originalidad en la obra de la monja. Muy por el contrario, se trata de una copia en las formas y procedimientos literarios que estimula la libertad creativa. Por otra parte, algunos críticos sostienen que este homenaje es un modo de Sor Juana de "competir" con Góngora, o sea, de mostrarse a la altura del gran poeta español para dar legitimidad a su propia obra.