Adiós, hermano mío

Adiós, hermano mío Otros grandes cuentos de John Cheever

En este apartado haremos un repaso de otros grandes cuentos de John Cheever, y veremos cómo los tópicos fundamentales de "Adiós, hermano mío" son recurrentes dentro de la obra del autor. Además, realizaremos una breve síntesis de cada relato, con el fin de incentivar su lectura y permitir una mayor familiarización con el universo de Cheever.

Comencemos con "El nadador". Al igual que "Adiós, hermano mío", este cuento está situado en el centro del ocio. Es una tarde de domingo veraniego. Neddy Merrill y su esposa Lucinda están en la casa de unos amigos, los Westerhazy. Lucinda y los dueños de casa se quejan de haber bebido demasiado. De repente, Neddy decide trazar una ruta particular de regreso a su casa: volverá nadando a través de las piscinas de sus vecinos. A lo largo del cuento, Neddy conoce a los habitantes de las mansiones de su barrio, y se topa con viejos conocidos que le sacuden emociones que parecían olvidadas. El ocio, los problemas con el alcohol, la nostalgia por el pasado y la incapacidad de enfrentar al presente son algunos de los tópicos que hemos visto en "Adiós, hermano mío" y que reaparecen en "El nadador". Cabe destacar que este cuento fue llevado a la pantalla grande en 1968. El filme, llamado igual que el cuento, fue dirigido por Sidney Pollack, y el papel de Neddy fue encarnado por Burt Lancaster.

Pasemos ahora a "La radio monstruosa". Irene y Jim Westcott son una pareja de clase media de Nueva York. Tienen una vida tranquila, sin sobresaltos. Un día, Jim le regala una radio a Irene, y ella descubre que esta capta las conversaciones privadas de sus vecinos. Lo que al principio es una curiosidad morbosa pronto se convierte en una obsesión. Irene se aísla de su propia vida y se sumerge por completo en las vidas de sus vecinos a través de la radio. A medida que Irene se obsesiona por la vida de los otros, su relación con Jim se deteriora más y más. Irene se vuelve paranoica y empieza a proyectar las miserias que escucha en la radio sobre su propio matrimonio. Jim, al principio distante de la radio monstruosa, también termina enfrascado en las conversaciones ajenas. La obsesión por las apariencias, la negación de los problemas, las miserias de la vida privada y los conflictos familiares son temas centrales en este cuento.

"El tren de las 5:48" también nos sitúa en la vida de los suburbios de Nueva York. La protagonista es Miss Dent, una mujer soltera que, al igual que los Westcott, vive una vida ordenada y tranquila. Una tarde, mientras espera el tren de las 17:48 para regresar del trabajo, un hombre joven, desaliñado y visiblemente perturbado se le acerca y comienza a insultarla de manera obscena y amenazante. Miss Dent queda muy afectada. Para peor, días después, Miss Dent comienza a recibir cartas anónimas escritas con el mismo tono obsceno y agresivo del desconocido que la atacó en la estación. A medida que la historia avanza, Miss Dent se obsesiona cada vez más con la identidad de su agresor. Intenta recordar detalles del encuentro en la estación y analiza cada carta en busca de pistas. La violencia, tópico central en "Adiós, hermano mío", y el sinsentido son centrales en este cuento que vuelve a exhibir la fragilidad de la vida cotidiana de sus personajes. "El tren de las 5:48" ha sido llevado a la televisión en la serie 3 by Cheever, de 1979, en la que se adaptaron tres relatos del autor.

El protagonista de "Oh, juventud y belleza" es Hugh Bascomb, un ex atleta estrella de la universidad. La historia comienza presentando a Hugh en sus años dorados, cuando era un joven admirado por su destreza atlética, su atractivo físico y su encanto. Sin embargo, la trama avanza rápidamente hacia el presente de Hugh, donde todo es muy diferente. Su físico se ha deteriorado, su atractivo se ha desvanecido y su gloria deportiva es ahora nada más que un recuerdo lejano. Hugh, además, se encuentra en una situación precaria, viviendo en la casa de unos amigos que esperan con ansias que se vaya. La nostalgia que hemos visto en "Adiós, hermano mío" se encarna aquí de la manera más cruel. Bascomb, a diferencia de los Pommeroy, no ha construido un presente sólido, y nada de lo que fue o tuvo otrora sigue existiendo. Este es otro de los relatos que han sido adaptados en la serie televisiva 3 by Cheever.

Para culminar, repasemos "Reunión". En este cuento, Cheever narra el encuentro entre un joven llamado Charlie y su padre, a quien no ha visto desde el divorcio de sus padres, tres años atrás. Charlie está lleno de ilusión y expectativas por este reencuentro. La reunión, sin embargo, resulta ser una profunda decepción. Su padre es un hombre grosero que no para de beber. Juntos visitan varios restaurantes y bares. Cuando termina el reencuentro, el padre está totalmente ebrio. Charlie se despide de él dándose cuenta de que la imagen idealizada que tenía de su padre se ha hecho añicos. El relato termina con una reflexión melancólica de Charlie (ya adulto), en la que deja entrever que nunca más lo volvió a ver. Los problemas con el alcohol, los conflictos familiares y los adioses vuelven a estar aquí en el centro de la escena.

Este breve recorrido por algunos de los cuentos más destacados de John Cheever revela la maestría con la que el autor explora las fisuras de la vida suburbana estadounidense. A través de personajes que lidian con el ocio vacío, el alcoholismo, la nostalgia, la fragilidad de las relaciones familiares y la irrupción de la violencia en la cotidianidad, Cheever construye un universo narrativo coherente y profundamente humano. Si bien cada relato presenta una situación particular y diferentes personajes, los ecos temáticos de "Adiós, hermano mío" resuenan con fuerza en cada uno de estos cuentos, permitiéndonos comprender con mayor profundidad los temas fundamentales que abordamos a lo largo de esta guía.

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