Genero
Cuento.
Configuración y Contexto
El cuento está ambientado en Buenos Aires. El narrador no proporciona una fecha específica. Sin embargo, el lenguaje de los personajes indica permite inferir que está situado entre 1900 y 1920.
Narrador y Punto de Vista
El cuento está narrado en primera persona.
Tono y Estado de Ánimo
Sardónico, cómico, trágico.
Protagonista y Antagonista
El protagonista es el narrador y el antagonista es Rigoletto.
Conflicto Principal
El narrador está comprometido con una mujer que no lo ama (o al menos eso siente él), por lo que decide actuar para liberarse de ella.
Climax
El clímax tiene lugar cuando Rigoletto increpa a Elsa, saca un revólver y le exige que lo bese.
Presagio
Tras ver cómo el jorobado golpea salvajemente a la cerda, el narrador le advierte que, si sigue comportándose así, lo estrangulará. Esto sucede al final del cuento.
Atenuación
El narrador se refiere a su plan de llevar a Rigoletto a casa de Elsa como una "idea pequeñita" (28), como si se tratara de algo insignificante, cuando es en realidad un plan cruel y humillante.
Alusiones
En el cuento hay diferentes tipos de alusiones. En primer lugar, hay alusiones religiosas: el narrador menciona a Cristo y su frase sobre los "sepulcros encalados" para describir a las personas que aparentan ser buenas pero son hipócritas. Por su parte, Rigoletto menciona a la Santísima Virgen en su discurso final, aunque afirma no creer en ella.
En segundo lugar, hay alusiones literarias y culturales: por un lado, el nombre "Rigoletto" es una alusión a la ópera de Verdi del mismo nombre, cuyo protagonista es un bufón jorobado. Por otro lado, el narrador menciona el "almanaque de Gotha", una publicación que registraba la genealogía de la nobleza europea.
En tercer lugar, hay alusiones sociopolíticas: el narrador menciona a Trotsky, Stalin y Lenin en el contexto de su relación con la señora X, quien finge interés en el bolchevismo para complacerlo y manipularlo.
Imágenes
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Paradoja
El narrador consigue que su plan se lleve a cabo a la perfección: Rigoletto genera el escándalo previsto. Paradójicamente, y pese a que su plan salió tal como lo esperaba, el narrador pierde el control, mata a Rigoletto y termina en prisión.
Paralelismo
Existe un paralelismo entre el narrador y Rigoletto. Pese a que son antagonistas, ambos personajes son marginados sociales y tienen características similares. El narrador se siente aislado por su hipersensibilidad, que le permite percibir la bajeza humana y lo convierte en un ser taciturno e irónico. Rigoletto, por su parte, es marginado por su deformidad física. Además, ambos personajes comparten una tendencia a la crueldad. El narrador planea un cruel engaño para Elsa, mientras que Rigoletto disfruta maltratando a la cerda.
Metonimia y Sinecdoque
El nombre "Rigoletto" funciona dentro del cuento como una metonimia. El narrador le asigna este nombre arbitrariamente, tomándolo de la ópera de Verdi, donde Rigoletto es el bufón jorobado de la corte.
Por otro lado, la joroba de Rigoletto funciona como una sinécdoque. La joroba, una parte del cuerpo de Rigoletto, se utiliza para representar a la persona completa.
Personificación
El plan del narrador es personificado, adquiriendo rasgos de un ser vivo que crece y se desarrolla en la mente del narrador: "...se me ocurrió la "idea" –idea que fue pequeñita al principio como la raíz de una hierba, pero que en el transcurso de los días se bifurcó en mi cerebro, dilatándose, afianzando sus fibromas entre las células más remotas–..." (26). La idea se presenta, así, como una planta que nace pequeña y luego crece, extendiendo sus raíces en el cerebro del narrador. Esta imagen orgánica dota a la idea de una vitalidad propia y animada.
