Resumen
El cuento transcurre durante la cuaresma. En la ciudad de Buenos Aires, se sigue la tradición del ayuno y la abstinencia, sobretodo de la carne, para seguir las costumbres de la religión católica. Luego llega una gran tormenta que desborda el Río de la Plata y obstaculiza las calles. Esta inundación provoca la escasez de novillos en la ciudad.
Buenos Aires es gobernada por el Restaurador. Sus seguidores políticos, los federales, culpan a sus opositores, los unitarios, del diluvio y la escasez de carne. La comida se encarece brutalmente y cada vez existen menos posibilidades de conseguir alimentos para subsistir en medio de la cuaresma. La situación empeora y se produce una gran hambruna, que genera muchas muertes en la ciudad.
Análisis
"El matadero" es un texto que parece estar entre el cuento y lo que se denomina el ¨cuadro de costumbres¨. El ¨cuadro de costumbres¨ es un artículo escrito en prosa en el que se plasman características propias de una profesión, región o clase. Por lo general, tiene un tono satírico o nostálgico y exhibe ambientes, costumbres, vestidos, fiestas y otras cuestiones típicas de una sociedad.
Durante la primera mitad de ¨El matadero¨ predomina un tono crítico, en el que Echverría observa ciertas actitudes de la población de Buenos Aires, del Gobierno y de la Iglesia. En esta primera parte del relato predomina un tono burlón y el uso de la ironía. Justamente por la descripción del ambiente y sus habitantes, y por el tono que emplea el autor al hacer esta descripción, podemos afirmar que el relato posee elementos del ¨cuadro de costumbre".
¨Los abastecedores, por otra parte, buenos federales, y por lo mismo buenos católicos, sabiendo que el pueblo de Buenos Aires atesora una docilidad singular para someterse a toda especie de mandamiento, solo traen en días cuaresmales al matadero, los novillos necesarios para el sustento de los niños y de los enfermos...¨. En esta cita podemos observar, por un lado, la descripción que hace Echeverría de cuál es la costumbre de los abastecedores de carne durante la cuaresma, pero, al mismo tiempo, percibimos ese tono irónico y burlón cuando determina que el hecho de ser buen federal es sinónimo de ser buen católico.
