Regina se enamora de su violador.
Cruz viola a Regina cuando ingresa junto a su batallón al pueblo donde ella vive. En lugar de rechazarlo, Regina se enamora de él y comienza a seguirlo de pueblo en pueblo, mientras la guerra continúa. Resulta irónico que el único amor real que tuvo Cruz durante toda su vida sea producto de una violación.
Catalina cree que Cruz mató a su hermano, cuando en verdad su hermano es quien "mató" los ideales revolucionarios de Cruz.
Catalina odia a Cruz porque piensa que él mató a su hermano durante la Revolución, y se niega a creer lo que Cruz les ha contado. Sin embargo, Cruz no mató a Gonzalo, ni siquiera intervino en su fusilamiento (ni para salvarlo ni para condenarlo), por lo que el odio que le tiene Catalina es infundado. En verdad, las palabras de Gonzalo Bernal en la prisión son las que empujan a Cruz a abandonar a todas sus ilusiones revolucionarias y dejarse llevar solo por sus ambiciones. En ese sentido, algunos críticos sostienen que Gonzalo Bernal mató, figuradamente, al Cruz revolucionario.
Cruz muere un instante después de decirse que sobrevivirá.
A lo largo de toda la novela, Cruz se repite a sí mismo una y otra vez que es un sobreviviente. Las secciones narradas en segunda persona utilizan el futuro para contemplar las acciones del pasado como si estuvieran marcadas por el destino. Resulta irónico que Cruz, consciente de que está por morir, no pare de repetirse "sobrevivirás" (p. 257), incluso hasta el instante previo a su muerte.
Creyendo que se trata del hombre que viene a llevarse a Lunero, Cruz termina matando a su propio tío.
A los 14 años, Cruz se entera de que el patrón de la hacienda mandará a su enganchador a buscar a Lunero para ponerlo a trabajar y trata de evitarlo. Para eso, busca la escopeta que está colgada en la galería de la casa a la que se le prohibe entrar y se esconde en un recodo del camino a esperar la llegada del enganchador. Sin embargo, quien aparece en el camino es Pedro Manchaca y Cruz le dispara sin saber que de esa forma está matando a su propio tío.