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¿Por qué, según el autor, la plástica está condenada a su decadencia en la época de la reproductibilidad técnica?
En la época de la reproductibilidad técnica, el público consumidor del arte es la masa. Según Benjamin, esta le exige al arte poder supervisarla. El cine, por ejemplo, permite que la masa se siente en la sala y, en simultáneo, juzgue la película. Por el contrario, las obras de las artes plásticas tienen en su esencia el hecho de poder ser contempladas por pocas personas a la vez. Los museos permiten que mucha gente vea un mismo cuadro en simultáneo, pero esta gente no siente que puede dar su veredicto: en los museos reina el silencio. La masa no opina sobre la obra. Al no poder satisfacer la demanda del público, la plástica está condenada a la decadencia.
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¿Cuál es la relación entre cine y dadaísmo?
Según Benjamin, el dadaísmo preparó a la masa para que esta encuentre satisfacción plena a sus exigencias artísticas en el cine. El dadaísmo modificó la relación entre el público y la obra. En lugar de ofrecerle regocijo a sus espectadores, las obras dadaístas le ofrecieron una distracción basada en el escándalo y la irritación pública. Convirtieron la obra de arte en un proyectil que impactaba en el público. El cine, precisamente, se destaca por tener la capacidad de captar a sus espectadores a través de la distracción. No necesita que sus espectadores estén activos buscando el regocijo en la película, sino que va hacia ellos, los sumerge en el filme mediante el constante efecto de shock, el constante impacto de sus proyectiles: el cambio de cámara, las luces, la peripecia de la película, la música, los efectos especiales.
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¿Qué es el culto a la personalidad y cómo se relaciona con la esfera política?
El culto a la personalidad es una operación realizada por la industria occidental del cine que consiste en convertir a sus actores en personas famosas, en estrellas. Mediante revistas, periódicos, noticieros, la industria del cine se encarga de que la masa conozca íntimamente la vida de las grandes estrellas de cine: quiénes son sus parejas, cuáles son sus gustos, sus hobbies.
Este culto a la personalidad genera la idea en la masa de que el actor de cine es mucho más que un intérprete. No es un hombre que mantiene su humanidad frente a la cámara al hacer su trabajo, sino una especie de superhombre.
El culto a la personalidad se relaciona con la esfera política a través del fascismo, que tiene como una de sus características más importantes, precisamente, el culto a sus líderes. Hitler, por ejemplo, ha sido construido, mediante la propaganda, en una especie de deidad. Es venerado por la masa, a priori, por su personalidad. Esto posibilita que sus acciones y decisiones políticas sean incuestionables.
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¿Cuál es la función social del arte en la época de la reproductibilidad técnica?
La función social del arte en la época de la reproductibilidad técnica es lograr un equilibrio entra la humanidad y la tecnología. Tras la Revolución Industrial, el mundo se ha poblado de un montón de nuevos aparatos y máquinas que rodean al hombre en su cotidianeidad, especialmente en su trabajo. En su jornada laboral, el hombre pierde su humanidad frente a este nuevo sistema de aparatos. No comprende cómo funciona la maquinaria con la que se relaciona diariamente. Se limita a apretar sus botones y accionar sus palancas. Los aparatos entregan un producto fabricado que el ser humano percibe como ajeno, aunque haya sido él quien activó a los aparatos, es decir, quien realmente fabricó el producto.
Ante este enajenamiento, el arte debe interceder y ayudar a que los hombres comprendan esa "nueva naturaleza" que lo rodea. El cine es el arte más indicado para llevar a cabo esta función, ya que, en su esencia, están los aparatos. El intérprete de cine tiene la tarea de mantener su humanidad frente a este sistema de aparatos mientras actúa. De este modo, la masa podrá vislumbrar en la actuación del intérprete la posibilidad de rebelarse contra los aparatos, mantener su humanidad frente a estos, y dominarlos en lugar de ser sometida diariamente.
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¿Qué es lo único que no puede copiar la reproducción técnica de una obra original?
Su "aquí y ahora". Cada obra de arte es producida en un espacio y tiempo determinado, y además tiene su propio recorrido histórico. Lo único que no puede captar la reproducción técnica es, justamente, ese aquí y ahora de la obra auténtica. Por ejemplo, si La Gioconda auténtica, pintada por Leonardo Da Vinci, viaja de un museo a otro, o sufre algún tipo de rotura, La Gioconda (o Las Giocondas) reproducida no viajará como lo hizo la obra original ni sufrirá la misma rotura. Ese "aquí y ahora" conforma el aura de la obra de arte auténtica.