Trafalgar es la cuarta novela escrita y publicada por Benito Pérez Galdós y la primera del monumental proyecto constituido por cuarenta y seis novelas históricas del autor, denominado Episodios nacionales. Los Episodios nacionales se publican entre 1873 y 1912 y están divididos en cinco series ordenadas cronológicamente en las que se narran, en clave realista, historias de diferentes personajes, mientras se da a conocer la historia de España desde 1805 hasta 1880. Trafalgar inaugura la colección y la primera serie.
Su título se refiere a una famosa batalla ocurrida frente a la costa del cabo Trafalgar el 21 de octubre de 1805. Se considera este suceso histórico como uno de los combates navales más importantes del siglo XIX. La contienda se produce en el contexto de las guerras napoleónicas, cuyo objetivo principal es la expansión del imperio francés, con el consecuente dominio de Napoleón Bonaparte sobre Europa. La batalla de Trafalgar se vincula con los planes de Napoleón, el reciente emperador de los franceses, de invadir las islas británicas. A pesar de que en España no todos los oficiales se muestran conformes con la decisión de participar, se enfrentan las escuadras aliadas de Francia y España contra la armada británica. Esta última resulta vencedora y el resultado constituye un golpe duro contra las intenciones invasoras de Francia y también contra España, ya que su marina queda muy debilitada. Además, da comienzo a un largo periodo de poderío naval británico.
El autor de la novela comienza a trabajar con la investigación de los sucesos que en ella se narran en el año 1872, cuando conoce a un veterano de guerra partícipe en aquel combate naval. La escribe velozmente, entre enero y febrero de 1873, y la publica en marzo de ese mismo año.
La novela está narrada en primera persona por Gabriel de Araceli, un personaje y narrador que será recurrente en la primera serie de los Episodios. De hecho, la primera serie abarca un total de diez novelas escritas entre 1873 y 1875, de las cuales nueve se dedican a contar la historia de este personaje: un anciano que cuenta su vida y, a través de ella, grandes acontecimientos de la historia española del siglo XIX. En Trafalgar, el lector conoce la vida de Gabriel desde los primeros años de su infancia. La acción se enfoca en lo que sucede cuando el joven gaditano, a los catorce años y mientras vive como un criado bajo el amparo de una familia acomodada de Cádiz, se enrola con su amo, un oficial reservista de la Armada ya entrado en años, en una de las embarcaciones que participan en la batalla de Trafalgar.
El móvil de Galdós para inaugurar los Episodios está vinculado con su patriotismo, su propósito didáctico y la búsqueda de la identidad española. Esta obra presenta una finalidad didáctica y moralizante: el autor noveliza la historia española y procura que los lectores aprendan y reflexionen, de un modo entretenido, sobre los hechos históricos recientes de su país. Para lograr sus objetivos, se vale de la novela histórica, un género literario narrativo que permite la combinación de eventos históricos con una trama de ficción novelesca.
En Trafalgar, además, convergen características de diversos géneros literarios. Así, la novela presenta, hacia el inicio, ciertas reminiscencias de la picaresca. La picaresca es un género originado en España en el siglo XVI que tiene como protagonista a un pícaro, un personaje pobre y desdichado. Este narra en primera persona y de forma retrospectiva su vida y sus aventuras para sobrevivir en un ambiente hostil, en el que aprende a engañar, mentir y robar. Más aún, esta obra de Benito Pérez Galdós se puede relacionar con la novela de aprendizaje. Se trata de un tipo de narración que pone el foco en un personaje joven que pasa por un proceso de crecimiento y aprendizaje que lo lleva a ser más sabio, madurar y poder reflexionar sobre los hechos de su vida. La narrativa realista del autor de Trafalgar se acerca, además, a la de las novelas de costumbres, que retratan comportamientos y valores de una sociedad en un momento específico. Incluso, en momentos puntuales, aparecen ciertos rasgos épicos, dado que se exaltan valores heroicos y un sentimiento patriótico. Por último, incorpora incluso algunas características del folletín, tanto por la construcción de un hilo melodramático relacionado con un tema amoroso, como por la forma de serie que adquiere la colección, en la que cada novela termina con el anuncio de la continuación de las aventuras en una siguiente próxima a lanzarse.
La novela está compuesta por diecisiete capítulos que desarrollan de forma cronológica toda la vida del narrador, desde su infancia, hasta el regreso del combate. La mayor parte de la novela está centrada en unos pocos días: el de la batalla, los días previos y los posteriores. Así, la vida de los personajes está íntimamente ligada con sucesos importantes de la historia española que se narran de forma detallada en la novela, a la vez que se prescinde de todo hecho histórico que no sea vinculante con la acción narrada. Los personajes adquieren una caracterización realista y el lenguaje empleado por ellos da cuenta de la forma en la que cada uno se expresa, incluyendo ciertos vulgarismos o expresiones coloquiales que dan cuenta de la clase social a la que pertenecen.
Debido al gran éxito de esta obra y de la colección Episodios nacionales, así como el reconocimiento a su función didáctica, el autor adapta esta novela y otras de la primera serie para el público infantil. Las publica bajo el título Episodios nacionales extractados para el uso de los niños, primero en fascículos, en 1909, y luego de forma completa, en 1915, en la Editorial Sucesores de Hernando de Madrid.