El papel pintado amarillo

El papel pintado amarillo Metáforas y Símiles

"Hay una zona recurrente donde el dibujo se dobla como un cuello roto, y te miran dos ojos saltones puestos al revés" (Narradora, 10) (Símil)

La narradora usa la comparación para describir el diseño del papel amarillo que tanto le fascina. Se trata de un patrón recurrente, es decir, que se repite, y, de acuerdo con su apreciación, bastante siniestro. En determinados puntos el diseño se dobla y la mujer describe esas curvas comparándolas con cuellos humanos quebrados, fracturados. Este símil es un indicio de lo que ocurrirá más adelante, cuando la protagonista comience a ver figuras humanas completas o decapitadas en el empapelado.

"Va tan bien como hacer gimnasia, en serio" (Narradora, 12) (Símil)

Cuando la protagonista comienza a obsesionarse con el diseño del papel amarillo, cree que su estado de salud está mejorando. Así, asegura que pasar horas y horas cada día estudiando el patrón es beneficioso, y compara esta actividad con el ejercicio físico. El tono de la narración en este punto es tan sutil que es posible interpretar este símil de manera literal, pero también puede pensárselo como ironía: dado que la protagonista termina por perder la cordura al final del relato, las dos interpretaciones se mantienen válidas al mismo tiempo.

"... la proliferación de líneas crea grandes oleadas de horror óptico, como una vasta extensión de algas movidas por la corriente" (Narradora, 13) (Símil)

La protagonista ofrece constantes descripciones y apreciaciones del dibujo del papel pintado amarillo. En este fragmento, pone el énfasis en el patrón que desde el comienzo le resulta fascinante y horroroso. Entonces describe a través de un símil sus líneas curvas, que parecen en movimiento, y las compara con algas que se mueven de manera ondulante por efecto de las corrientes de agua. El símil contribuye a crear la atmósfera siniestra del relato, ya que, como ella misma dice, se trata de un "horror óptico" (13) y transmite la sensación de asfixia que la narradora expresa hacia el final del texto, dado que pinta un paisaje subacuático, donde una figura humana no puede respirar.