Los gallinazos sin plumas

Los gallinazos sin plumas Elementos Literarios

Genero

Cuento.

Configuración y Contexto

La historia se desarrolla en Lima durante la década de 1950. Se menciona específicamente la avenida Pardo en el barrio de Santa Cruz, Miraflores, como escenario.

Narrador y Punto de Vista

El punto de vista es el de un narrador omnisicente.

Tono y Estado de Ánimo

El tono de la narración se puede describir como crudo en la forma en que representa la vida de los actores marginales del espacio urbano. Por momentos, se percibe una atmósfera fantasmal, vinculado a la percepción irreal de la hora celeste. El estado de ánimo predominante es desesperanzador, por la manera en que se describe esta realidad hostil en la que viven los personajes.

Protagonista y Antagonista

Los protagonistas del cuento son los hermanos Efraín y Enrique. El antagonista principal es su abuelo, don Santos, descrito como un viejo ruin y déspota que los explota.

Conflicto Principal

El conflicto central radica en la opresión y explotación que sufren Efraín y Enrique por parte de su abuelo, don Santos, quien los obliga a recolectar basura para alimentar a su cerdo Pascual.

Climax

El relato va construyendo un clima de tensión ascendente que comienza cuando los niños no pueden salir a buscar alimento en la basura porque están enfermos, y empieza a escalar con el hambre cada vez más grande de los niños y del cerdo y con la bronca cada vez más intensa de don Santos. El momento de mayor tensión ocurre cuando Enrique arroja a su abuelo al chiquero como reacción a que don Santos ha matado a su perro para dárselo de comer al cerdo.

Presagio

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Atenuación

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Alusiones

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Imágenes

Ver sección "Imágenes".

Paradoja

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Paralelismo

Se establece un paralelismo entre los "gallinazos sin plumas" (los niños) y los gallinazos reales, ambos dedicados a buscar desperdicios (ver sección "Símbolos").

Metonimia y Sinecdoque

La identificación de Lima se realiza por sinécdoque, al mencionarse la "avenida Pardo" (6) como representación de la ciudad.

Personificación

La ciudad es personificada al inicio del relato: "A las seis de la mañana la ciudad se levanta de puntillas y comienza a dar sus primeros pasos" (6). Esta personificación se refuerza al final, cuando la ciudad aparece como un ser vivo que abre "su gigantesca mandíbula" (18) ante Efraín y Enrique, que se escapan del corralón cuando ha terminado la hora celeste, ingresando en una ciudad que desconocen y que les resulta extremadamente hostil.