En la sangre

En la sangre Símbolos, Alegoría y Motivos

La sangre (Símbolo)

La sangre es el símbolo más importante y explícito de la novela, ya que aparece en el título de la obra. La sangre representa la carga ineludible de la herencia genética, social y moral de un individuo. La que Genaro lleva en sus venas es portadora de “gérmenes malsanos” y contiene “las bajas pasiones de la humanidad” (72). De esta manera, la sangre simboliza el determinismo biológico y social que condena a Genaro a una existencia marcada por la avaricia, la hipocresía y la violencia. Este simbolismo sugiere que el individuo está predeterminado por su linaje y entorno, haciendo inútil cualquier esfuerzo de superación y redención moral.

El apodo "tachero" (Símbolo)

“Tachero” es el oficio de hojalatero del padre de Genaro, que él hereda por ser su hijo. El apelativo, usado por sus compañeros para burlarse de él, se convierte en un estigma social y un constante recordatorio de los orígenes humildes que el protagonista desprecia. Es un término que connota clase social baja, pobreza y falta de prestigio, circunstancias que Genaro se esfuerza por ocultar y superar. También es uno de los factores que despiertan en él el deseo de venganza, no solo contra sus compañeros, sino, incluso, contra su propio padre. Busca borrar esa mancha de infamia y demostrar que es superior a quienes lo desprecian, lo que lo conduce a adoptar métodos deshonestos y brutales en su ascenso social.

El dinero (Símbolo)

Desde la mezquindad de su padre hasta sus propias especulaciones financieras y el despojo de la herencia de Máxima, la vida de Genaro gira en torno del dinero y de la acumulación de riqueza. Para Genaro, el dinero no es solo un medio, sino un fin en sí mismo, en cuanto es símbolo de poder, estatus y valía personal. El dinero es la herramienta que usa para construir su fachada de señor, comprar lujo y conexiones, y ejercer su venganza contra aquellos que lo menospreciaron. Sin embargo, se revela insuficiente para proporcionarle felicidad genuina, aceptación social profunda o paz interior, mostrando la futilidad de su búsqueda, puramente materialista.

El libro (Símbolo)

El libro, como símbolo de la cultura y del ascenso social mediante la educación, representa para Genaro un obstáculo infranqueable que revela su “indigencia intelectual” (75). Su incapacidad para el estudio lo conduce a utilizar los libros como mera decoración en la universidad y a reaccionar con furia frente a la física, disciplina que pone en evidencia sus limitaciones racionales. Esta frustración lo empuja hacia la simulación y la astucia, y culmina en el robo de la bolilla en un examen para garantizar su éxito, episodio que anticipa su camino de fraude. Tras este hecho, abandona por completo la lectura, gesto que simboliza su renuncia a las vías nobles de ascenso y su degradación moral, eligiendo la indolencia y la manipulación en lugar del conocimiento.

El Club del Progeso (Símbolo)

Este club de élite simboliza la máxima aspiración de pertenencia a la alta sociedad argentina de fines del siglo XIX, representando prestigio, exclusividad y aceptación por parte de la “gente de bien” y las “familias decentes”. Para Genaro, ser socio de este club sería un paso decisivo para consolidar su proyección de ascenso social y borrar los últimos vestigios de su origen humilde. Su intento de ingreso, frustrado por el rechazo del club, evidencia la barrera que las estructuras sociales y los prejuicios de clase imponen. Este rechazo humilla a Genaro y alimenta su resentimiento, reforzando su determinación de vengarse de quienes lo consideran inferior.