Ella está en un Cadillac con Filomena que Guinea quien está pagando los gastos para que Esther vaya a un hospital privado. La Sra. Guinea se aseguró que Esther no estuviera en problema con ningún muchacho antes de decir que ella la ayudaría. La madre de Esther piensa que Esther debería ser más agradecida con ella. Si no fuera por la ayuda de la Sra. Guinea, Esther hubiera ido a un hospital estatal, donde la atención es muy mala. Ella tiene su propia habitación en el primer piso y no hay barrotes en las ventanas. Esther se da cuenta de que ni siquiera se causaría moretones si saltara. Su médico es una joven mujer llamada Dra. Nolan. Cuando ella se encuentra por primera vez en su habitación, muchos médicos extraños entran y se presentan. Le recuerdan a los doctores del último hospital. Un doctor varón le cuenta acerca de los peregrinos y los indios y ella sabe que él está diciendo mentiras. Él sale y Esther se sorprende al descubrir que puede pasear por el lugar. Ella camina por el salón y se encuentra con una chica llamada Valerie. Trata de presentarse a ella, pero no tiene mucho éxito en esa tarea. Valerie le dice que todos los demás pacientes están fuera caminando o en terapia ocupacional. Valerie le recuerda de una niña scout que una vez conoció. Ella no puede entender por qué Valerie está en el hospital. Ella está leyendo una revista de modas y parece muy normal.
Cuando la Dra. Nolan viene a hablar con ella, ella le pregunta si ella está bien. Luego, pregunta si puede fumar. Esther dice que si, admitiendo que le gusta el olor. La doctora le pregunta a Esther por qué no le gustaba el Dr. Gordon. Esther le cuenta acerca de su terrible experiencia con la terapia de choque. La Dra. Nolan está desconcertada por esto y le dice a Esther que no se supone que eso sea así. Según la Dra. Nolan, la mayoría de la gente siente que someterse a un tratamiento de choque es como irse a dormir. Ella le asegura a Esther que si ella debe recibir más terapia de choque, se le avisará previamente y que será muy diferente. Cuando la Dra. Nolan sale, Esther está feliz de ver que ha dejado atrás los fósforos. Ella piensa que puede estar siendo puesta a prueba, pero ella oculta los fósforos en el dobladillo de su bata de todos modos.
Una nueva mujer se instala en la habitación junto a ella. Esther va a presentarse y se sienta allí durante mucho tiempo. La mujer, la Sra. Norris, permanece en silencio y se levanta. Esther la sigue al comedor donde se sientan y esperan la cena sin hablar. Las enfermeras le inyectan insulina a Esther todos los días y le dan después un vaso de zumo de frutas azucarado. Ellas esperan con cuidado para ver si tiene algún tipo de reacción negativa. Esther comienza a engordar.
Después de un tiempo, a ella se le permite caminar en los jardines, pero a la Sra. Norris se le permite salir al exterior. Valerie pasea con ella y le muestra las cicatrices en sus sienes. Son cicatrices de la lobotomía. Valerie está orgullosa de ellas, dice: "Ya no estoy más enojada. Antes estaba enojada todo el tiempo." Capítulo 15, pág. 158. Probablemente Valerie nunca saldrá del hospital.
A Esther le dicen abruptamente que ella está siendo trasladada a la otra ala de la instalación. Esto denota algún tipo de progreso. La Sra. Norris no está siendo trasladada, a ella la han derivado nuevamente a Wymark, un nivel inferior. La zona en la que se encuentran es Caplan. Es el nivel medio. Esther ha estado esperando hablar con la Sra. Norris durante tres semanas, pero ella no lo ha hecho. El día del traslado, la enfermera le dice que alguien que conoce está viniendo para quedarse en el hospital. Se trata de Joan, una ex novia de Buddy.
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