Los advertidos

Los advertidos Guía de Estudio

El cuento "Los advertidos" de Alejo Carpentier fue publicado en 1967 en la colección de relatos Guerra del tiempo, para una edición francesa del libro, aunque la primera versión data de 1958.

El relato está inspirado en un viaje que Carpentier realizó por la región del Orinoco en Venezuela en 1948. Allí entró en contacto con mitos y leyendas indígenas, entre ellas, la de Amalivaca o Amaliwak, un héroe mitológico que le recordaba al Noé del relato bíblico sobre el diluvio universal. Así fue que se le ocurrió la idea de “Los advertidos”, un cuento en el que “todos los Noés del mundo vienen a ver al viejo anciano Amalivaca y se lo encuentran en América”. De esta forma se propuso, como sostiene en La novela latinoamericana en vísperas de un nuevo siglo y otros ensayos (1981), “traer Europa hacia acá y verla de aquí hacia allá” (106), para darle a América “su lugar dentro de la universal unidad de los mitos, demasiado analizados en función exclusiva de sus raíces semíticas o mediterráneas” (69).

El encuentro entre varios héroes míticos del diluvio –el Amaliwak de los indígenas tamanacos de Venezuela, el Noé de la cultura judeocristiana, el Hombre de Sin de la mitología china, el Deucalión de la Antigua Grecia y el Out-Napishtim (o Utnapishtim) de la cultura sumeria– permite explorar las similitudes y diferencias entre las diversas versiones del mito del diluvio, resaltando la universalidad del mito, pero también la particularidad de cada cultura. Al situar el relato desde el punto de vista americano, Carpentier aprovecha el mito para reflexionar sobre la historia y la cultura de América Latina, y sobre la relación entre el continente americano y el resto del mundo.

Algunos críticos han interpretado que “Los advertidos” es una exploración antropológica de la cultura indígena americana. Sin embargo, es importante destacar que Carpentier prioriza en sus relatos la creación artística antes que el análisis científico, y que los temas indígenas aparecen más como elementos literarios que como objetos a investigar por sí mismos. En esta versión del mito del diluvio, que se cuenta también como un cruce entre culturas, se trastoca el estilo solemne de los relatos mitológicos para ofrecer una perspectiva más paródica o farsesca, que desmitifica el mito y recupera el relato mitológico como un producto del devenir histórico de la humanidad.