Cuando Jerry le declara su amor a Emma, los lectores y espectadores ya sabemos que esa relación está destinada al fracaso (Ironía dramática)
Al estructurar la trama de la obra en una cronología inversa, Pinter extrema por completo el recurso de la ironía dramática. En teatro, este tipo de ironía se produce cuando el lector o espectador posee información que no está disponible para los personajes de la historia.
En Traición, sabemos desde el comienzo que Emma y Jerry tuvieron una aventura, que esa aventura ya terminó, y que Emma y Robert se están separando. Por lo tanto, a medida que la obra avanza, sabemos hacia dónde se dirige todo; no así los personajes. Por ejemplo, la última escena —que es la primera situación en términos cronológicos— nos presenta el inicio de la relación amorosa, el momento en que Jerry se le declara a Emma en la habitación que ella comparte con su esposo Robert: “Yo te adoro. Estoy loco de amor por vos. (…) Esto es lo único que ha pasado. Tus ojos me matan. Estoy perdido. Sos maravillosa.” (135, 136). Algo similar sucede en la escena VIII, con la infidelidad ya consumada, cuando vemos a Emma y Jerry compartiendo un almuerzo doméstico en el apartamento que han alquilado para verse en secreto. En suma, el uso de la ironía dramática es parte integral de nuestra interpretación de la obra, la cual se tiñe de un aura de triste escepticismo.
Robert asegura que Jerry es su mejor amigo, pero solo para indicar lo contrario (Ironía verbal)
En la escena II, Jerry intenta entender por qué Robert siguió reuniéndose con él durante tantos años a pesar de saber que lo estaba traicionando. Eventualmente, la conversación toma la siguiente dirección:
JERRY: Pero nos estuvimos viendo… mucho… estos últimos cuatro años. Fuimos a almorzar.
ROBERT: Pero a jugar squash no fuimos más.
JERRY: Yo era tu mejor amigo.
ROBERT: Bueno, sí, seguro.
(Jerry lo mira fijamente y luego se toma la cabeza entre las manos).
ROBERT: Oh, no te hagas problema. No tiene sentido.
(Silencio).
(Jerry se incorpora en su asiento). (83)
El hecho de que Robert responda “seguro” al comentario de Jerry, quien dice ser su “mejor amigo”, constituye una ironía verbal, puesto que solo busca enfatizar la traición. Jerry es bien consciente de esta ironía, y eso lo lleva a tomarse la cabeza con las manos.
Emma le pregunta a Jerry si alguna vez le ha sido infiel, cuando ella es su amante (Ironía situacional)
En la escena ocho, que sucede en el departamento donde Emma y Jerry tienen su aventura, se produce este intercambio:
EMMA: ¿Alguna vez fuiste infiel?
JERRY: ¿A quién?
EMMA: A mí, por supuesto.
JERRY: No.
(Pausa).
JERRY: ¿Y vos… a mí?
EMMA: No.
(Pausa). (131)
La pregunta de Emma contiene una buena dosis de ironía, dado que es ella quien ha desempeñado un papel activo en la infidelidad de Jerry hacia su esposa Judith. Ciertamente, aunque Jerry y Emma son infieles con sus respectivos cónyuges, Emma no juzga moralmente este hecho, siempre y cuando sean fieles el uno al otro hacia el interior de su aventura. Estamos, por lo tanto, ante una escena que revela la hipocresía de los valores morales de los personajes de la obra.
Jerry insulta a Robert por no haberle hecho saber que sabía que se acostaba con su esposa (Ironía situacional)
En la escena I, Emma le revela a Jerry que le contó a Robert, su mejor amigo, sobre su aventura. Esto provoca que Jerry se ponga ansioso y sienta remordimiento. En la escena siguiente, por lo tanto, visita a Robert para explicarle la situación y disculparse. Aunque Jerry está arrepentido, cuando le menciona el asunto a Robert, este responde que no es muy importante, y que lo sabe hace años. Jerry se queda impactado por esta revelación, ya que creía que acababa de enterarse, y, enojado, inicia el siguiente diálogo:
JERRY: ¿Y entonces por qué no me dijiste?
(Pausa).
ROBERT: ¿No te dije qué?
JERRY: Que ya sabías. Hijo de puta.
ROBERT: Ay, no me digas hijo de puta, Jerry.
(Pausa). (84)
Frente a la calma de Robert, resulta irónico el enfado de Jerry, quien se siente engañado por no haber sido avisado por su amigo, el verdadero traicionado de los dos, de su conocimiento acerca de la traición. Fiel al estilo de Pinter, esta interacción desafía cualquier expectativa que uno pueda tener ante una situación así.