Después de la ópera, el público se va para la casa de Julius Beaufort y su esposa, Regina Beaufort, para su baile anual. Aunque la sociedad neoyorquina desconfía de Julius Beaufort porque sus raíces son “modestas”, todos están de acuerdo en que los Beaufort tienen el mejor salón de baile de la ciudad. Archer, como siempre, llega elegantemente tarde. Está nervioso porque la familia de May va a llevar a Ellen al salón. Si juzga por lo que oyó decir a los hombres en la ópera, Archer concluye que la aparición de Ellen en el salón va a ser algo socialmente desatinado.
Cuando Archer entra al salón, ve a May anunciando su compromiso a un grupo de jóvenes. Archer y May saben que un salón de baile no es el lugar ideal para hacer un anuncio tan importante, pero es necesario hacerlo. Ambos quieren que la atención se aleje de Ellen y quieren que la familia sea vista desde un lado positivo.
Seguimiento de tema: Matrimonio 3
Archer se dirige al grupo y luego conduce a May hacia la pista de baile. Después que el baile termina, caminan hasta el invernadero para hablar en privado. May le pregunta si le contó a Ellen sobre el compromiso y cuando se entera que no lo hizo se siente desilusionada. Le pide una vez más que se lo diga a su prima y Archer acepta hacerlo.
Se siente aliviado cuando May le cuenta que Ellen decidió no venir al salón porque su vestido no era lo suficiente elegante. Sin embargo, tanto Archer como May saben que la verdadera razón por la que ella se fue para su casa. Archer admira la actitud de May de ignorar las circunstancias desagradables que rodean a Ellen. Toma una decisión: “Jamás le mostraré el menor signo de que estoy perfectamente consciente de que hay una sombra de mancha en la reputación de la pobre Ellen Olenska". Capítulo 3, página 27.